La conversación se ha producido a primera hora de esta mañana del jueves a instancias del líder del PSOE. Pedro Sánchez ha descolgado el teléfono para comunicarse con su interlocutor en el Palacio de la Moncloa por una cuestión de "lealtad", junto antes de registrar en el Congreso de los Diputados su petición de una subcomisión parlamentaria "pública, transparente y con luz y taquígrafos para que los expertos nos den su opinión sobre una reforma de la Constitución".
No ha querido Pedro Sánchez, en declaraciones a los periodistas en el Congreso, desvelar el contenido de esa conversación, pero sí ha contado que "ha sido hoy" porque "me parecía que era justo y leal hacerlo antes de presentar esta iniciativa".
Sánchez ha apelado al presidente a evitar "el cerrojo de la mayoría absoluta del PP a abrir el debate". Y de ser así, ha añadido, "tenemos un problema" porque "la mejor defensa de la Constitución es su reforma". "Ahora, tendrá que responder a esa pregunta el señor Rajoy".
Moncloa: No es el momento
Desde Moncloa, se confirma que efectivamente la llamada se ha producido pero alegan que la postura del Gobierno "sigue siendo la misma". Piden que el líder de la oposición plantee un "proyecto concreto" de reforma y entonces el Gobierno lo estudiará con detalle.
Aunque desde el Ejecutivo siguen sin cerrar la puerta a una reforma, recalcan que este no es el contexto adecuado. El consenso, dicen, tiene que "ser máximo". Y aseguran que es prácticamente imposible que el melón constitucional pueda abrirse en esta legislatura. Para Rajoy, es prioritario que haya un pacto sobre corrupción a cambiar el marco constitucional.
En este sentido, Javier Arenas tildó de "disparate" que Sánchez aspire a una reforma sin concretar "dónde quiere ir y quiénes le acompañan". En declaraciones a Efe, Arenas sospechó que el PSOE no define su plan porque "esconde un federalismo asimétrico que ni siquiera le aceptan sus compañeros del resto de España".