Nadie dice saber nada, pero todo el mundo participa en las quinielas. Y José Luis Ayllón, actual secretario de Estado de relaciones con las Cortes, es el nombre más repetido por los cargos consultados por este diario. De él destacan que estuvo en la dirección del grupo en la anterior legislatura, que es de la máxima confianza de Soraya Sáenz de Santamaría y que tiene dotes negociadoras.
La opción de Ayllón fue ganando fuerza a lo largo de la jornada. El hecho de que sea catalán y haya negociado mucho con las fuerzas de esta comunidad le convierten en un acto relevante, según coinciden varios diputados.
Quién, de momento, tomó las riendas del grupo fue José Antonio Bermúdez de Castro, que hasta ahora ha sido número dos de Alfonso Alonso en el Congreso de los Diputados. De perfil también negociador, se prepara muy bien los temas y es exquisito en las formas, pero en privado está dejando entrever que está feliz en la segunda línea y no querría ser portavoz. "Siempre estoy a disposición, pero ahora estoy realizando una función que creo que también es muy importante", dijo al término de la Junta de Portavoces.
Además de Bermúdez de Castro, la actual dirección del Grupo Popular la completan Rafael Hernando, Leopoldo Barreda, Marta Torrado, Beatriz Rodríguez Salmones, Rafael Merino y Matilde Asián. De ellos, Hernando -que es portavoz adjunto- es el diputado más conocido al estar bastante presente en las tertulias de televisión.
Pese a las quinielas, la totalidad coincide en que Mariano Rajoy tomará la última palabra, y no se pueden descartar sorpresas. Un portavoz de la Moncloa avisó de que la decisión se podría retrasar hasta este jueves y, en todo caso, el nombre sería anunciado por el partido. La expectación se mantenía entre los diputados, que prevén ser convocados a un pleno del grupo la próxima semana para aclamar al nuevo jefe.
"No lo sé. Hay que tomar ahora una decisión y espero que lo podamos cerrar rápido", se despidió Alonso a primera hora de la mañana de sus compañeros del Congreso. "Continuidad, sí. El grupo va a seguir haciendo el trabajo de defensa de la acción del Gobierno pero el que llegue tendrá que marcar su impronta. Yo no le voy a decir lo que tiene que hacer", remató, informa K. Garat.