El portavoz de UPyD en Cataluña, Ramón de Veciana, ha acusado a Ciudadanos de acudir a las negociaciones entre ambas formaciones sin voluntad de llegar a acuerdos y con una estrategia basada sólo en sacar "rédito político", un "trampolín" para ganar espacio en España y convertirse en la "muleta" del PP.
En una entrevista con EFE tras las negociaciones de esta semana, De Veciana ha afirmado que Ciudadanos no tenía "voluntad para llegar a acuerdos" y que "su única estrategia en Cataluña es quedar por delante del PP y el PSC" como "puente" para mostrar que "son la alternativa también en España", donde la presencia de UPyD "no les interesa".
Según De Veciana, el ofrecimiento de Ciudadanos a UPyD era una proposición de "todo o nada", de "listas únicas en las elecciones locales y autonómicas, y unas primarias únicas para los dos partidos" para las generales, sin ningún margen de acuerdo por parte de Ciudadanos de empezar con "un pacto puntual en Cataluña".
El portavoz catalán de UPyD ha calificado así la propuesta de Ciudadanos como "un contrato de adhesión, donde uno impone las condiciones y el otro sólo puede aceptarlas o no", en lo que ha sido una "propuesta de máximos y una manera de romper las negociaciones".
De Veciana ha rechazado las acusaciones de personalismo a la líder de su partido, Rosa Díez, y ha asegurado que ella "tiene menos presencia como líder que Rivera"; por contra, ha definido a Ciudadanos como "un partido claramente personalista".
Además, ha criticado "la falta de ética política" de Albert Rivera por pedir, tras romper las negociaciones con UPyD, que los votantes de la formación magenta apoyasen a Ciudadanos y le ha acusado de tener un "concepto patrimonial de la política".
El portavoz en Cataluña de UPyD ha afirmado que las negociaciones tensaron a Ciudadanos cuando se trataron temas como la corrupción, en las que ha destacado el caso del "número 22 de la lista de Ciudadanos (en las europeas)", imputado en un caso de presunta corrupción.
Pero la corrupción no fue el único tema de ruptura, ya que este mismo imputado pertenecía a otro partido diferente a Ciutadans, según ha explicado De Veciana, "en una lista donde de los 60 nombres 13 eran de otros partidos", que suelen ser de "carácter localista y regionalista".
Estos acuerdos entre Ciutadans y partidos locales, según el portavoz del partido de Rosa Díez en Cataluña, chocan con el "transfuguismo" que crítica UPyD, que censura que "una persona que haya sido escogida en una lista no puede pasar a otro partido político sin haber dimitido". Asimismo, De Veciana ha dicho desconocer cuáles son los estatutos del partido de Rivera.
De Veciana también ha advertido de "una deriva de Ciudadanos para acomodarse al sistema político catalán, que es lo que quieren los nacionalistas", postura que según el portavoz de UPyD llevaría a C's a ocupar "un espacio de confort" en el actual "régimen catalán". En este sentido y como ejemplo de esta "deriva" del grupo de Rivera es el "perfil político muy bajo" que ha ofrecido C's durante "la crisis constitucional del 9N".
Frente a la actitud de Ciudadanos, De Veciana subraya la reacción "contundente" de UPyD, presentando una querella contra el 9N y el presidente Artur Mas "a las 9 de la mañana, por los hechos flagrantes producidos" durante esa jornada.
El portavoz de UPyD en Cataluña también ha advertido de que Ciudadanos se puede convertir "en el partido fácil" y de "apoyo cómodo" que necesitaría el PP para pactar tras las próximas generales.
En este línea y con "cierto apoyo mediático", De Veciana cree que hay una operación para que Ciudadanos sea la "muleta" que sirva al PP para mantenerse en el poder, ya que UPyD es más incómodo para realizar pactos porque "exige condiciones", ha apuntillado.