El Partido Popular en Navarra se tambalea. El pasado 23 de julio, Enrique Martín de Marcos mandó una misiva a Mariano Rajoy anunciándole su decisión de dimitir como presidente de la formación, a la que llegó en mayo de 2012. Meses antes, había intentado sin éxito reunirse con María Dolores de Cospedal para alertarle de la difícil situación que, a su juicio, atraviesan las siglas en la región e intentar una remontada cambiado "nombres" e "ideas". Ante el silencio de Génova, ha optado por tirar la toalla.
"Lo peor y más decepcionante para mí en estos algo más de 2 años ha sido la sensación de falta de apoyo, falta de confianza e, incluso, ignorancia que he sentido en ocasiones" resume Martín en una carta a los militantes a la que tuvo acceso este diario. Las críticas a la dirección nacional se multiplican: "desde hace mucho tiempo falta una relación fluida basada en el respeto y la confianza entre ambas direcciones", se queja. Y aún añade: "no han sido pocas las ocasiones que a lo largo de este año he intentado ser recibido o al menos hablar con la secretaria general para informarle de la situación del partido y no lo he conseguido".
En concreto, Martín hace mención a una petición de reunión "por escrito" el día 31 de mayo "de la que ni tan siquiera se me ha remitido un acuse de recibo". "Más que mi discrepancia, mi gran decepción no es con lo fundamental del proyecto, sino con determinados dirigentes y personas del PP", concluye el líder regional, que lleva más de 31 años ligado a la formación pero que siempre fue un desconocido a nivel nacional. En breve, abandonará también su escaño en el Parlamento foral aunque seguirá siendo concejal en Tudela.
En la formación y desde hace ya tiempo, no pocos cargos advertían de que la situación era cada día peor. Se quejaban de la "nula" presencia del presidente en el territorio foral o de quedar excluidos de los "contactos" del Ejecutivo con Yolanda Barcina, con quien Rajoy tiene muy buena relación. Además, y a pesar del poco tiempo de la implantación del PPN -refundado en octubre de 2008-, existen distintas sensibilidades internas que ha afectado a su actividad política.
Zalba, favorito de la dirección
Ante esta dimisión, la dirección nacional ha decidido crear una gestora que dirigirá el eurodiputado Pablo Zalba. Para tratar de dar una imagen de tranquilidad, Carlos Floriano -el número tres del partido- se trasladará a Pamplona este martes para participar en la constitución de la comisión gestora y ofrecer posteriormente una rueda de prensa.
Zalba es, de hecho, el favorito de Génova para presidir la formación tras el periodo de transición que él mismo tutelará. El navarro podría compatibilizar los cargos, según las fuentes consultadas. Ana Beltrán también querría el cargo. El hecho de que la dirección ya tenga un favorito ha provocado las críticas privadas de algunos dirigentes regionales. A pesar de la crisis generada, Cospedal se limitó a decir que la marcha de Martín se debe a "motivos personales".