Sucedió lo contrario que en unas elecciones generales: los datos definitivos de participación se conocieron con posterioridad al 65% del escrutinio que ya arrojaba una victoria con claridad meridiana.
Según los datos proporcionados por Ferraz pasadas las 22:00 horas, el dato de participación sobrepasó la barrera del 65% que se habían fijado como éxito participativo en las primeras primarias abiertas para exigir al secretario general del PSOE. Con un dato del 65,85% de participación que supuso la movilización de 129.411 militantes de un total de 2.969 mesas electorales. 1.471 militantes se abstuvieron en la consulta y 255 mesas no se han llegado a constituir.
El retraso en los datos de abstención radicó en la existencia de "mesas especiales, de censo reducido y con horarios especiales de votación", que se constituyeron -la mayoría de ellas-, pasadas las 19:00 horas.
Dado que no hay precedentes en la participación de la militancia, el único referente posible es el de unas elecciones generales cuya participación suele rondar el 60% del electorado. Pero al tratarse de militantes que pagan una cuota por tener carnet del PSOE, la participación, se entiende, debe ser muy superior al resultado de unas generales en el que la abstención, el votante fluctuante o indeciso y el trasvase de voto de unos partidos a otros presume más independencia respecto a quienes adquieren un mayor compromiso partidista y, por tanto, participan en la toma de decisiones.
Por comunidades
Los datos ofrecidos por comunidades autónomas registran mayores porcentajes a la media nacional en las comunidades del norte: La Rioja (55,74%), Navarra (50,32%), Cantabria (47,86%) y País Vasco (40,89%). También superiores a la media, pero en menor medida en Murcia (44,53%), Castilla La Mancha (41,86%), Aragón (40,67%), Canarias (40,30%), Andalucía (39,83%), Extremadura (37,49%) y Comunidad Valenciana (37,34%).
Por debajo de la media están en Galicia (35,31%), Castilla y León (34,28%), Madrid (33,56%), Asturias (31,21%), Baleares (33,33%), Cataluña (26,68%), Ceuta (29,63%) y Melilla (33,33%).
Se da el dato curioso, a grandes rasgos, de que las comunidades que mayor participación registran fueron precisamente en las que Eduardo Madina obtuvo mayor número de avales.
Los temores
El temor a una baja participación "en un fin de semana de verano y final del mundial" ya había trascendido antes incluso de la campaña electoral en los equipos de los tres candidatos, temerosos de que la escasa movilización arrojara un resultado con "poca legitimación" en el futuro líder del PSOE que pudiera cuestionar su liderazgo de aquí a la celebración de primarias en el mes de octubre/noviembre tal y como se han comprometido Pedro Sánchez, Eduardo Madina y Pérez Tapias.
A sumar que una pírrica victoria complique el escenario del recién elegido sustituto de Alfredo Pérez Rubalcaba cuyo liderazgo se impuso a Carmen Chacón por apenas 22 votos de diferencia en el 38 Congreso Extraordinario de Sevilla. Un panorama de escasa ventaja que no contemplan en el equipo de Pedro Sánchez, pero que complicaría, aún más, el desembarco en Ferraz a la espera de unos meses venideros en que el PSOE ha de acometer la tan cacareada integración de personas y unificación de criterios en el modelo de partido y de Estado, con la discrepancia de fondo del PSC sobre el modelo a decidir y a apenas un par de meses de la consulta catalana del 9 de noviembre.
Como en los avales
Datos desglosados por comunidades autónomas, como ya ocurrió con el publicación de los avales y su procedencia por territorios tras la petición de un Eduardo Madina a quien se le dio la vuelta su reclamación. Pedro Sánchez se convirtió en el favorito del aparato andaluz de quien recabó cinco veces más avales que su contrincante vasco, diez veces más en el caso de Sevilla; y en el País Vasco, también ganó el diputado madrileño dejando incluso en Guipúzcoa un resultado siete veces mayor que el de Madina.