El presidente del Círculo de Economía, Antón Costas, ha pedido al presidente de la Generalidad, Artur Mas, que dé una "segunda oportunidad" al diálogo con España, ya que "pequeños gestos por parte de todos pueden abrir un nuevo tiempo".
"Creo que valdría la pena hacer un esfuerzo por parte de todos en busca de esta segunda oportunidad", ha afirmado Costas durante la inauguración de la XXX Reunión del Círculo de Economía de Sitges, en la que participa el líder catalán.
Costas ha pedido a Mas "cierta paciencia" en su reivindicación de celebrar una consulta separatista en Cataluña y ha asegurado que, en contra de lo que muchos opinan, el tiempo para retomar el diálogo no se ha agotado.
"Hablamos de choque de trenes y de que se ha acabado el tiempo. Estamos cayendo en el fatalismo", ha advertido el presidente del Círculo, que ha asegurado que su institución quiere "reaccionar" contra esta idea. "Creemos que tiene sentido dar espacio a la razón ilustrada y que tiene sentido darle espacio a la esperanza", ha apuntado Costas, que cree que eso significa partir del reconocimiento que tenemos problemas, tanto en Cataluña como en el conjunto de España.
En Cataluña, ha dicho, existe "un malestar bastante amplio" y un deseo de "gran parte" de la población de tener mayor autogobierno. "Eso hay que reconocerlo, no es una creación ficticia. Es un sentimiento ciudadano muy importante. Llamémosle problema catalán o como queramos, pero si no lo recogemos, provocará frustración", ha avisado.
Por su parte, el problema español radica en la necesidad de llevar a cabo una reforma "amplia e importante" desde el punto de vista legal y posiblemente "constitucional", para facilitar, precisamente, el encaje de Cataluña en España.
Frente esos dos problemas, opina Costas, "una de las soluciones es preguntar a la ciudadanía qué es lo que quiere, consultarla", un paso que considera "lógico", siempre que se realice conforme al marco legal. "Creemos que una consulta legal y bien informada es una consulta válida", ha afirmado el presidente de este grupo de presión empresarial.
Ha incidido en que el Círculo no toma partido por ninguna opción, pero sí defiende que la ciudadanía "tenga la mayor información sobre las condiciones y las reglas" que deberían seguir tanto a una consulta como a una reforma institucional.
Antón Costas ha remarcado que las dos necesidades, la española y la catalana, "no son excluyentes", por lo que ha emplazado a los políticos a ser capaces de llevar adelante la reforma constitucional, lo que "daría más juego y más campo a la propia idea de consulta".
Para hallar una salida consensuada a este debate, el economista cree que "vale la pena dar una especie de segunda oportunidad" al diálogo, ya que uno de los objetivos de la función pública es "reducir incertidumbres". Costas ha comentado asimismo que la necesidad de impulsar cambios no ha de significar "partir de cero". "Creo que hay que resistirse a esa tentación, a esa funesta manía que tiene nuestra historia de querer olvidar lo existente y empezar de nuevo", ha apostillado.