Es el único que hasta el momento ha arremetido contra Alfredo Pérez Rubalcaba tras su anuncio de que dejará la secretaría general del PSOE en el mes de julio, pero no el primero que denuncia su intención de vulnerar los estatutos del PSOE para abrir el Congreso a la militancia. José María Barreda ha insistido en que lo "lógico" era haber adelantado las elecciones primarias, para que "pudieran votar los militantes pero también los simpatizantes".
Pero preguntado directamente qué le parece que Rubalcaba ceda a la apertura del Congreso a la militancia, Barreda contestó así en los pasillos del Congreso. "Sinceramente... yo creo que peor imposible. Porque no se puede dimitir y no dimitir, porque no se puede ser confuso, porque no se puede saltar los propios estatutos a la torera...".
Y añadió: "Yo creo que tendría que haber tranquilidad, sosiego y que los órganos de dirección funcionen".