Segundo día de campaña y mitin al uso. "¡Qué calor!", resoplaba el candidato. Once de la mañana en el centro cultural Conde Duque de la capital. Sombreros, mucho abanico y banderolas con el logo del PP. Y, por supuesto, música a todo volumen. "Se ha producido un acontecimiento extraordinario. Don Alfredo (Pérez Rubalcaba) ha dicho una cosa que era verdad: el PP y el PSOE no son lo mismo", ofrecía Miguel Arias Cañete como primer titular. Esperanza Aguirre intercedía entre risas: "¡Imposible!".
Con Mariano Rajoy sin actos este fin de semana, Cañete ganó en protagonismo. Y se le ve más que cómodo encima de un mitin. "Don Alfredo, no somos lo mismo", repitió en constantes ocasiones provocando la carcajada del auditorio -la mayoría procuradores e interventores-. Según la organización, un millar de personas, las 900 sillas ocupadas. "Creemos en España y en su unidad. Siempre hemos creído en los mismos principios", arengó. La líder madrileña también tiró de esta tesis: "Entré en el PP para defender sus ideas y principios y sigo comprometida con ellos. Y, además, con todos vosotros. No os puedo fallar".
La economía ocupó buena parte de las intervenciones. También las de Ignacio González y Ana Botella, que con Aguirre hicieron de teloneros. "No es lo mismo", continuó Cañete, que contrapuso modelos: Elena Valenciano quiere "el de Andalucía y yo el de Madrid", radiografió. "Andalucía: derroche de dinero público, de paro, de todo. Lo de la jueza Ayala es un espectáculo", resumió. Enfrente, situó la gestión de la Comunidad y el consistorio: "Crecimiento económico, liberalismo, ¡basta ver los datos!", sentenció.
"Para que la presidenta no me chille: liberalismo", fue otra de las perlas que dejó Cañete. "Creemos en las personas y en su autonomía no en las subvenciones y en el clientelismo", prosiguió, no sin atacar el "feminismo trasnochado" de su rival. "Si acritud, como diría mi amigo Alfonso Guerra, y con respeto pero haga memoria", le pidió a la socialista, volviendo a provocar las risas del público.
"Como en los toros, pretendo que no me den el tercer aviso", dijo socarrón cuando el calor ya apretaba. Hizo, por cierto, una loa a la familia. Antes, Aguirre y González se acordaron de las víctimas del terrorismo: "No queremos más doctrinas Parot, queremos justicia y dignidad", dijo el segundo. Y Botella puso la atención en una de las cuestiones que más preocupa a Rajoy en esta campaña: "Tenemos que ayudar a la participación. La democracia siempre se resiente de las ausencias", fue su aplaudido aviso.