Esperanza Aguirre ha abogado, ante cerca de 200 personalidades de la vida social y política británica, por dar "un toque british" a la política española, un toque que consistiría sobre todo en que los partidos no sean organizaciones "monolíticas" como en el caso de España.
La presidenta del PP de Madrid ha apostado por un sistema electoral mayoritario como británico, en el que los diputados son más independientes al tener que ganarse la confianza y el voto de sus conciudadanos.
"Anglomaníaca"
Ante la Cámara de los Comunes –el parlamento que concentra el poder legislativo en Gran Bretaña- Aguirre se ha declarado "anglomaníaca" sin por ello dejar de mostrarse orgullosa de ser española. En su discurso, la popular ha expresado su convicción de que "con unas gotas de anglomanía, todo en España, marcharía mejor".
De hecho, ha apostado por una fórmula que considera idónea: "Una buena mezcla de las dos maneras de entender la vida, la británica y la española, podría ser una fórmula ideal para todo".
La conferencia estaba organizada por la British-Spanish Society, en un foro en el que el año pasado fue invitado el alcalde de Londres, Boris Johnson; mientras que en 2012 lo fue Michael Portillo, uno de los últimos líderes británicos más importantes del Partido Conservador. La British-Spanish Society había recibido más de 500 peticiones para asistir a la intervención.
El país de Churchill y Thatcher
Aguirre se mostró muy agradecida por la oportunidad de intervenir en la misma cámara en la que lo hicieron algunos de los políticos que la expresidenta de Madrid más admira: Winston Churchill y Margaret Thatcher, dos ejemplos claros de una de las virtudes británicas que más gusta a la popular: un patriotismo "que les lleva a defender siempre los intereses de su patria".
La sociedad británica, según Aguirre, "siempre valora el individualismo y siente recelo ante los colectivismos". Por ello se trata de un país que "ha defendido siempre la libertad", y en el que incluso "cuando algunos caen en la tentación de ser socialistas, se hacen fabianos, que es una manera muy tenue de serlo".
Otra virtud inglesa que Aguirre ha elogiado ha sido "que se valore la originalidad y hasta la excentricidad, porque no me gusta que todo el mundo piense igual, sea igual y haga lo mismo". Cultivar esa originalidad ha sido, según la presidenta del PP de Madrid, la razón por la que muchos británicos se han hecho "hispanomaníacos", es decir amantes y admiradores de España del mismo modo que ella es "anglomaníaca".