Los dos bloques parecen bien delimitados. María Dolores de Cospedal arropa a Arantza Quiroga, en una situación interna muy difícil después de que su candidato a secretario general del PP vasco diera un paso atrás ante las presiones. Alfonso Alonso, al que se le presupone el apoyo de Soraya Sáenz de Santamaría, mantiene el pulso y quiere ver reforzada su influencia en la nueva dirección.
"No voy a hablar de presiones o no presiones", zanjó la número dos de los populares, preguntada expresamente por la posición de Alonso. Si bien, de inmediato, salió en defensa de Quiroga: "Hay una persona que se ha presentado y tiene que formar un equipo de confianza", sentenció. Esto es, el hombre de Sáenz de Santamaría debe cesar en su actitud y dejar manos libres a la que será refrendada como líder el próximo sábado.
La palabra que más repitió Cospedal fue "confianza". "Consensuado también, pero de confianza", insistió en declaraciones a los periodistas, a la entrada del congreso del PP europeo en Dublín. En este sentido, rechazó que en la dirección nacional haya malestar ante la imposibilidad de Quiroga de dar solución a la brecha interna. "No hay molestia, todo lo contrario. Esa noticia es mentira".
Así, Cospedal entra de lleno en la crisis y da un respaldo muy importante para una Quiroga que este martes parecía tocada. "No ha habido ningún amago de dimisión, eso no es verdad", puso encima de la mesa. La fuentes consultadas creen que Alonso intoxicó situando a la sustituta de Antonio Basagoiti al borde del precipicio político. Del otro lado lo niegan y dicen que fue ella "para dar pena".
En todo caso, la secretaria general de los populares recalcó que, en cualquier partido, existen fricciones antes de la celebración de los congresos.
Barberá, protagonista en Dublín
La llegada de la delegación española al centro de convenciones coincidía con el rumor de que Rita Barberá podría sustituir a Miguel Arias Cañete al frente del Ministerio de Agricultura y Pesca. "No parece probable", respondieron fuentes de la dirección nacional. Cospedal defendió una vez más "los tiempos" de Mariano Rajoy para anunciar el elegido mientras en los círculos populares se da por hecho que el ministro será el candidato.
Por cierto, que Íñigo Méndez de Vigo, también en las quinielas, participa en el cónclave y es uno de los cargos más destacados del Ejecutivo en Dublín. Barberá también asiste a la cita.