
La soledad de Pere Navarro es ya un secreto a voces. Según informan fuentes del propio partido a Libertad Digital, el número de bajas en el PSC ha aumentado en los últimos días y esto hace peligrar las próximas elecciones municipales de 2015.
Lo cierto es que la herida abierta en el PSC hace dos meses no deja de sangrar. Al número de bajas de militantes en las últimas semanas tras la polémica generada por la sanción a los tres diputados díscolos, habría que sumar ahora la advertencia de varios dirigentes que han dejado claro que no quieren figurar en las listas del PSC para las municipales.
Además, desde su propio partido confirman que cada vez más dirigentes de peso en el PSC estarían cuestionando el liderazgo de Navarro ante la evidente crisis interna así como su incapacidad para poner una solución a lo ocurrido el pasado 16 de enero.
Ese día los diputados Joan Ignasi Elena, Nuria Ventura y Marina Geli rompieron la disciplina de voto a favor de llevar el referéndum ilegal al Congreso de los Diputados desafiando al presidente de su partido y también a dirección de Ferraz.
De momento, los tres 'díscolos' son diputados rasos en la cámara catalana que tan sólo han perdido sus cargos en las diputaciones catalana tras desobedecer a su partido. De hecho, el Consejo Ejecutivo del PSC aún está estudiando la posibilidad de expulsarlos definitivamente de esta formación política.
Navarro le resta importancia
Pese a que ante los medios el propio Navarro se empeña en quitarle hierro a este asunto, desde el PSC aseguran que temen que el 'efecto Maragall' pase factura tanto a las municipales como a las europeas del próximo 25 de Mayo.
Este lunes el exconsejero socialista Ernest Maragall, y actual líder de la formación Nova Esquerra Catalana (NECat), anunció que será el número dos de ERC en la lista para las próximas elecciones europeas.
Maragall, uno de los exdirigentes socialistas más críticos con el rumbo de la actual dirección y que abandonó la militancia, se sumará así a la lista de ERC, que mantiene conversaciones también con el exdiputado del PSC-CpC Toni Comín, con el objetivo de "ampliar y fortalecer el proyecto de izquierda nacional". La noticia ha sentado como un jarro de agua fría en en las filas socialistas.