Fue todo un aviso a navegantes, explicitado en el Monasterio de Yuste ante el Heredero de la Corona y el presidente de la Comisión Europea. En la Constitución de 1978 "cabemos todos" y es "la mejor garantía para alcanzar la Justicia y la prosperidad de todos los españoles", afirmó solemnemente Mariano Rajoy. Esto es, no está dispuesto a cambios en el texto, como reclama Alfredo Pérez Rubalcaba, y ni mucho menos aceptará una consulta en Cataluña, como le exige Artur Mas.
En el último aniversario de la Carta Magna, el presidente parecía dispuesto a abrir un proceso de negociación para retocar la Carta Magna. Ya entonces, desde el PSOE se insistía en la "tercera vía" y Rubalcaba le pedía a Rajoy, en un encuentro en la Moncloa, que se sentara a hablar bajo la máxima de que Cataluña debe seguir formando parte de España. Pero el Gobierno nunca lo vio claro. "No hay consenso", repiten portavoces autorizados. "Es una propuesta con tantas lagunas que genera más problemas que otra cosa", desechan.
Este jueves, Rajoy quiso dar por zanjado el debate, al menos públicamente. El respaldo de su Ejecutivo al texto del 78 es total y el presidente no ahorró elogios a la Constitución. "La elaboramos entre todos", fruto de un "consenso" histórico. "Tuvo el inmenso mérito de devolvernos a Europa", recordó. Juntos, dijo el presidente, la recuperación económica llegará antes.
No es baladí que el presidente lanzara esta idea en Yuste y ante don Felipe y Duraro Barroso, que recibió el premio europeo "Carlos V 2012". Y que, además, lo hiciera el mismo que día que el Parlamento catalán aprueba llevar la consulta al Congreso de los Diputados.
Por su parte, el príncipe evitó cualquier referencia explícita a la unidad de España y la tensión territorial existente y se centró en la economía. "Persisten aún tasas de desempleo inaceptables", afirmó don Felipe, que tuvo un recuerdo especial para los jóvenes. Si bien, también habló de perspectivas "esperanzadoras" y sacó pecho de que España y Portugal -en el acto también estaba Passos Coehlo- sean "los socios más comprometidos con las reformas".