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Así se rebeló Aznar en 1988

Este lunes, Aznar vuelve al Club Siglo XXI, el sitio donde en 1988 leyó un discurso histórico en que criticó con dureza a la dirección de AP

En 1988, Alianza Popular vivía una grave crisis interna. Manuel Fraga había abandonado la dirección del partido y convocó un congreso al que se presentaron Antonio Hernández-Mancha y Miguel Herrero de Miñón. Ganó el primero por un estrecho margen. El nuevo líder popular era un senador andaluz desconocido, sin carisma que ni siquiera se podía enfrentar a Felipe González, ya que el presidente del Gobierno no acudía al Senado.

Crítica a AP y defensa del liberalismo

En este difícil contexto interno, un invernal 29 de febrero, se presentó políticamente en Madrid la única esperanza para muchos miembro de AP: José María Aznar. El joven político se había convertido en una promesa al conseguir la presidencia de Castilla y León. Ésta era, junto con Galicia, la única comunidad gobernada por Alianza Popular.

Aznar se presentó en el Club Siglo XXI. Una asociación cultural que se había convertido en el epicentro político del país. Allí, por ejemplo, presentó Fraga a Santiago Carrillo, con todo lo que eso suponía. También había sido el lugar escogido para que las diversas familias de UCD (liberales, socialdemócrata, demócratas-cristianos) escenificasen sus rupturas con discursos trufados de indirectas. Y, como no, también fue la tribuna pública en la que Aznar se consagró como futuro líder de AP. Allí pidió un cambio histórico. Aseguró que a Alianza Popular le faltaba "eficacia", por eso reclamó un congreso extraordinario "antes o después del verano". También que el partido acentuase "el proyecto liberal" y, en un guiño a Herrero de Miñón, apartado del órgano después de la victoria de Hernández Mancha, pidió integrar a dirigentes que , por aquel entonces, estaban fuera de la dirección de AP. "No nos podemos permitir el lujo de no contar con Herrero", aseveró.

Al igual que hace ahora, Aznar realizó una encendida defensa del liberalismo que "exige dejar en manos de la sociedad grandes parcelas de poder". Además, pidió reducir el sector público y bajar los impuestos y criticó la labor de la oposición. En su opinión, el centro derecha había "caído una y otra vez en las trampas" del socialismo, y por ello instaba a una organización "más flexible" y "regionalizada".

El discurso en el Club Siglo XXI fue saludado por gran parte de la derecha. Hasta por los "oficialistas" del partido. Al día siguiente, Hernández Mancha anunció que pondría en marcha un congreso extraordinario, tal y como le pidió Aznar horas antes. El andaluz ya podía intuir que ese acto sería su sentencia política y que acabaría con la vuelta temporal de Fraga. El gallego volvería a tomar el control del partido durante apenas medio año. Meses más tarde se lo cedería a Aznar.

Y ahora...

Han pasado 25 años desde aquel discurso y, de nuevo, Aznar toma la palabra para hacer un diagnóstico "de peso" sobre la situación del país. Ya no es la joven promesa de hace un cuarto de siglo sino un político consagrado pero, al igual que entonces, ejerce -según los suyos- de portavoz de portavoz de las bases. En una reciente entrevista concedida en Antena3, el expresidente del Gobierno criticó la política impositiva de Rajoy: "Hace falta bajar impuestos en España",aseguró. Pidió al Ejecutivo que reaccione, "que actúe, tiene que actuar todos los días". Y defendió a las clases medias a las que consideró "las más castigadas" por la crisis económica.

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