El hasta ahora líder de los populares vascos, Antonio Basagoiti, ha decidido dejar la política. Con esta decisión y su nuevo destino en Telefónica, Basagoiti dice que quiere devolver a su familia todos los sinsabores de estos años dedicado a la vida pública.
Basagoiti sucedió a María San Gil al frente del PP vasco en 2008, año del famoso Congreso de Valencia cuando San Gil tomó la decisión de abandonar el liderazgo del PP vasco tras verse apartada en la elaboración de la ponencia política de aquel congreso.
Giro político
Desde aquel mes de octubre de 2008 cuando Antonio Basagoiti se hizo cargo del partido han pasado cinco años en los que el PP vasco ha formado parte de una coalición para sacar a los nacionalistas del Gobierno, pero también ha protagonizado un giro político que ha terminado dando la espalda a la trayectoria llevada por antecesores como Jaime Mayor, Carlos Iturgáiz o la propia María San Gil. Así se lo han reconocido y aplaudido a su despedida no sólo los nacionalistas, sino también el entorno de ETA.
Sin ir más lejos, esta misma semana, el presidente de Sortu, Asier Arranz ensalzaba los esfuerzos realizados por el ya expresidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, por cambiar la línea ideológica de su formación y alejarse de la herencia política que había dejado su antecesora en el cargo, María San Gil.
Según Arranz, "Basagoiti se dio a sí mismo la misión de reconducir al Partido Popular vasco desde la extrema derecha de María San Gil, Santiago Abascal y compañía hasta un centro que entonces se antojaba poco menos que remoto. Toda una proeza, porque la distancia política que separaba todo aquel PP del centro político era entonces galáctica".
Un giro político que quedaba patente, entre otras cosas, por declaraciones como las de Borja Semper, el presidente del Partido Popular de Guipúzcua, cuando dijo no estar seguro de si Bildu era ETA, pero que, en cualquier caso, el futuro del País vasco había que construirlo con ellos. Unas declaraciones que apoyó también el alcalde del PP de Vitoria, Javier Maroto.
Estas declaraciones le valió a ambos políticos y, en su conjunto, al PP de Basagoiti también el aplauso de la portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, quien llegó a decir que "con Semper y Maroto "me he sentido muy cómoda" porque "tengo una relación muy natural con ellos. Saben distinguir el trato personal de la actividad política". Y no contenta con ello, añade: "Les felicito y les digo que yo estoy en esa misma sintonía. La única manera de acercar las ideologías es acercar a las personas".
Los aplausos a ese giro llegan también desde la orilla del PNV. El presidente de su ejecutiva, Andoni Ortuzar, señaló también en estos días que espera que el PP vasco siga la línea emprendida por Basagoiti y que, cuando éste abandone la presidencia, no cambie de estrategia porque sería un "suicidio político".
Parece que la sucesora de Basagoiti, Arantza Quiroga, está en sintonía con las palabras del peneuvista, ya que señala en una entrevista este domingo en ABC que "recibo un PP fuerte y de centro, que ya salió de la trinchera".
Fuga de votos
En cualquier caso, algunas fuentes consultadas insisten en que la valoración de la trayectoria política de Basagoiti al frente del PP vasco habría que hacerla en clave política, es decir, analizando más el balance de votos que los mensajes lanzados –como si no estuvieran relacionados-.
Pero, atendiendo a esta observación, el saldo político de Basagoiti no puede ser peor. En las elecciones vascas de octubre de 2012 el PP vasco sufrió un batacazo electoral obteniendo 130.000 votos, diez diputados y cuatro en la Comunidad Autónoma Vasca. Esto suponen 5 escaños menos y la pérdida de 80.000 votos respecto a los resultados obtenidos por María San Gil en el 2005 (210.000 votos (17,4%) y 15 diputados).
Una fuga de votos que es más patente si nos remontamos unos años al pasado. En 1998 con Carlos Iturgaiz de candidato a lehendakari, el PP obtuvo 252.000 votos (20,1%) y 16 diputados. En el 2001 el candidato fue Jaime Mayor Oreja, que sacó el mejor resultado de la historia del PP en el País Vasco: 327.000 votos (23,1%) y 19 diputados.
Así, los cinco años de Basagoiti al frente del partido en el País Vasco dejan como punto positivo más reseñable su coalición con el Partido Socialista de Euskadi comandado por Patxi López para desalojar al PNV del poder. Una coalición que fue ampliamente derrotada por los nacionalistas en las últimas elecciones.