La sesión de control de este jueves de la Asamblea de Madrid se ha centrado en las dos grandes cuestiones político – sindicales que están llenando las portadas de la actualidad madrileña: Telemadrid y la Sanidad.
Respecto a la cadena pública el debate ha venido a cuenta de una pregunta del portavoz de IU, Gregorio Gordo, que en su habitual tono exaltado ha hablado de "carnicerías sociales y laborales", de un ERE "cruel y sanguinario" y de "cercenar la vida de 1.000 familias".
El presidente madrileño ha recordado que Telemadrid tiene "un déficit de 100 millones de euros" y que la ley obliga a que, a partir de 2013, los medios públicos de comunicación autonómicos no puedan generar déficit.
Además, Ignacio González ha asegurado que su ejecutivo está "dispuesto a negociar", pero que para ello no es adecuada el comportamiento de los sindicatos, "amenazando a los trabajadores que no quieren hacer huelga, llevando a negro la emisión y privando a los madrileños de la posibilidad de ver la televisión que pagan".
Por si no había quedado claro, el popular ha insistido en hablar de la "actitud violenta, intransigente y amenazante de los sindicatos" señalando que no es el "mejor escenario" para esa negociación y que "si alguien acaba con Telemadrid será por su actitud", en referencia a los sindicatos y los partidos de izquierda.
Más sobre la Sanidad
Los otros dos portavoces de los grupos de la oposición, Luis de Velasco y Tomás Gómez han preguntado al presidente sobre la Sanidad. El primero ha sido el de UPyD, en su tono pausado habitual pero en esta ocasión algo más contundente, llegando incluso a pedir dimisiones pues en su opinión la intención de externalizar la gestión de varios hospitales "es el reconocimiento de un fracaso". "Si no saben gestionar, váyanse, dimitan", ha comentado.
Tomás Gómez, por su parte, ha hablado del "millón de firmas" recogidas en contra de los planes de la Comunidad de Madrid, que "ha dinamitado" los tres pilares de la Sanidad puesta en marcha "en el año 86 por el ministro socialista Ernest Lluch: la universalidad, la provisión pública y ser financiada con impuestos".
Finalmente, el socialista le ha dicho al presidente que "ningún madrileño votó estas medidas y tampoco le votaron a usted" y que "la mayoría absoluta de Aguirre le queda muy grande".
"Amarrado al sillón"
Ignacio González ha empezado su respuesta asegurando una vez más que, "aunque le moleste", la Sanidad en Madrid "va a seguir siendo universal, gratuita y de la máxima calidad". "No cerraremos hospitales como se ha hecho en otras partes", ha rematado el popular.
También ha recriminado al socialista que no aporte "ni un argumento, ni una alternativa ni una propuesta" y le ha mencionado, una vez más, su gestión en Parla en la que "lo privatizó-externalizó todo". Y de nuevo le ha recordado sus propias opiniones: "Cuando llegó aquí defendía que las empresas privadas deberían participar de la gestión de la Sanidad".
Por último, recogiendo el guante lanzado por Tomás Gómez, González ha asegurado que él estaba en la lista del PP "que han votado el 51% de los madrileños". "A mí –ha explicado el presidente- no me habrán votado, pero a usted sí, el peor resultado de la historia y no ha tenido la dignidad de irse. Ahí está, amarrado al sillón".