"Mariano, dales tensión"
A Rajoy, desde la última vez que lo vi, se le ha atenorado la voz, ha adquirido empaque de criador de reses bravas de sexta generación y se ha recortado la barba (que sin embargo no es aparentemente más cana que cuando perdió las anteriores elecciones generales), porque recuerdo que decía un estudio fisiognómico publicado en El Mundo que mantenía que Rajoy tenía cara de dejadez. Si todo un señor registrador de la propiedad que se ha dejado el culo apaisado de empollar es dejado, ¿qué puede ser entonces un vulgar "lisensiado" de la facultad chiringuito de Derecho en León que no ha pegado sello en su vida? Rajoy está ahora en plena forma. Ya no dice "kolossal" a todo, pero ha aprendido a gritar en los mítines, que sabe que eso no se hace con la garganta, sino con el estómago.
Estrenaba ayer el PP, al menos en Murcia, el nuevo tema de campaña, "revuelta popular". En cambio, el tema en sí es poco revoltoso: es una de las aproximadamente doscientas treinta y dos mil coma ochenta y tres canciones que expolían ahora en España al día aquello que en su año hicieron "Los Secretos". A aquello de Los Secretos, Los Modelos, etc. se le llamó "pop baboso", por contraponerlo al sonido más gamberro de las famosas "hornadas irritantes". Y no, no se parece a "Los Nikis", a los cuales se conocía por "Los Ramones de Algete" y daban mucha más matraca. No se me interprete mal. Lo de "revuelta popular" está infinitamente mejor que el "por fin nuevas ilusiones" con que el PP le descuidaba la guitarra a María Ostiz en el 96, porque el tonillo ya no recuerda a una asamblea ecuménica más o menos oscense, sino a una teleserie para preadolescentes, lo cual es bastante. Pero cuarenta y cinco minutos seguidos de canción por los altavoces (lo que duraron los prolegómenos) no me sirvieron para adivinar que detrás del actualizado pop baboso de toda la vida se hablaba de revueltas y tal. Yo hubiese jurado que la cosa hablaba de ford fiestas blancos, de gafas "wayfarer" negras que ocultan lágrimas o de la pudorosa virtud de las lauras, en fin, lo clásico. Pero no: por allí repartían un prospecto con la letra, y no.
Rajoy mandó callar. "Recordadme que os cuente lo de Gabilondo". Por fin se lo recordó una señora que, allá en las pajareras, llevaba un cartel que ponía "Mariano, dales tensión". "Eso me recuerda lo de Gabilondo". Y contó lo de Gabilondo. Un par de votantes potenciales del PSOE pero que resulta que votan al PP (y que desde luego no tenían nada que ver con esa "sedición con abrigo de visión" que pinta Pepiño Blanco para describir al PP) me daban golpetazos en la colleja, al más puro estilo llano del sureste: "qué huevos tienen estos gallegos, no hay gallego que no tenga huevos". Si lo sabrían ellos, que antes había salido la alcaldesa de Cartagena, también gallega y de apellido Barreiro, y les había recordado lo del coche oficial del almirante Carrero y a la primera esposa de Jesús de Polanco.
-¡Barreiro! Como aquellos motores del año cuarenta, qué huevos tiene la tía, a esta no la mata el marido, no...
-Pero, ¿no se había separado él de ella?
-Si ya te digo, que lo habría "matao" ella a él y el tío no tuvo huevos de quedarse...
¿Es eso o no es esto el "dales caña, Arfonzo" del PP? Porque el PP no es lo del "speakers corner" para señoritos de la calle serrano instalado junto al escaparate de Loewe, junto a la bandera de Colón, sino, sobre todo, esto, puro pueblo provinciano, pura vida, que diría un costarricense. Esta gente admira profundamente a Rajoy, que de estirado nunca ha tenido nada, otra vez contra la propaganda oficial. Y sin tener Rajoy que ver con la acreditada casa de motores "Barreiros" ni Cristo que lo fundó, lo cual tiene más mérito, si cabe.
Estrenaba ayer el PP, al menos en Murcia, el nuevo tema de campaña, "revuelta popular". En cambio, el tema en sí es poco revoltoso: es una de las aproximadamente doscientas treinta y dos mil coma ochenta y tres canciones que expolían ahora en España al día aquello que en su año hicieron "Los Secretos". A aquello de Los Secretos, Los Modelos, etc. se le llamó "pop baboso", por contraponerlo al sonido más gamberro de las famosas "hornadas irritantes". Y no, no se parece a "Los Nikis", a los cuales se conocía por "Los Ramones de Algete" y daban mucha más matraca. No se me interprete mal. Lo de "revuelta popular" está infinitamente mejor que el "por fin nuevas ilusiones" con que el PP le descuidaba la guitarra a María Ostiz en el 96, porque el tonillo ya no recuerda a una asamblea ecuménica más o menos oscense, sino a una teleserie para preadolescentes, lo cual es bastante. Pero cuarenta y cinco minutos seguidos de canción por los altavoces (lo que duraron los prolegómenos) no me sirvieron para adivinar que detrás del actualizado pop baboso de toda la vida se hablaba de revueltas y tal. Yo hubiese jurado que la cosa hablaba de ford fiestas blancos, de gafas "wayfarer" negras que ocultan lágrimas o de la pudorosa virtud de las lauras, en fin, lo clásico. Pero no: por allí repartían un prospecto con la letra, y no.
Rajoy mandó callar. "Recordadme que os cuente lo de Gabilondo". Por fin se lo recordó una señora que, allá en las pajareras, llevaba un cartel que ponía "Mariano, dales tensión". "Eso me recuerda lo de Gabilondo". Y contó lo de Gabilondo. Un par de votantes potenciales del PSOE pero que resulta que votan al PP (y que desde luego no tenían nada que ver con esa "sedición con abrigo de visión" que pinta Pepiño Blanco para describir al PP) me daban golpetazos en la colleja, al más puro estilo llano del sureste: "qué huevos tienen estos gallegos, no hay gallego que no tenga huevos". Si lo sabrían ellos, que antes había salido la alcaldesa de Cartagena, también gallega y de apellido Barreiro, y les había recordado lo del coche oficial del almirante Carrero y a la primera esposa de Jesús de Polanco.
-¡Barreiro! Como aquellos motores del año cuarenta, qué huevos tiene la tía, a esta no la mata el marido, no...
-Pero, ¿no se había separado él de ella?
-Si ya te digo, que lo habría "matao" ella a él y el tío no tuvo huevos de quedarse...
¿Es eso o no es esto el "dales caña, Arfonzo" del PP? Porque el PP no es lo del "speakers corner" para señoritos de la calle serrano instalado junto al escaparate de Loewe, junto a la bandera de Colón, sino, sobre todo, esto, puro pueblo provinciano, pura vida, que diría un costarricense. Esta gente admira profundamente a Rajoy, que de estirado nunca ha tenido nada, otra vez contra la propaganda oficial. Y sin tener Rajoy que ver con la acreditada casa de motores "Barreiros" ni Cristo que lo fundó, lo cual tiene más mérito, si cabe.
Abarca para escribir mal no escribas. Es la columna más embarullada que he leido en mi vida.
ABARCA, tengo una duda:¿Mariano es el del principio y el final del duelo a muerte en OQUEICORRAL, versus zETAp, o es el de enmedio, el de la enjundia? Lo digo porque,si lee lo que le sale en la pantallita, es capaz de aburrir a Wilander. Sin embargo, si se echa la muleta a la izquierda, es capaz de cortarle a zETAp las dos orejas. Creo que el rabo no lo querría. Eso para otr@s.
Abarca, pues a mi me encanta como escribes, embarullada, pues como hablamos en Murcia!
Abarca no me conoces y estuve a tres o cuatro metros de ti. Y no se si te lo pasaste bien o mal. Desde luego me parece que llevas razón. Mas de media hora con la canción es mucho, pero reconoceme que es mejor que el ballenato. Por cierto escribe algo sobre el pijo del Ministro de Justicia. Si pijo pero no de Murcia, pijo de señorito de toda la vida. De los que mandaban antes y mandan ahora. De los progres de mas de 40 millones la reforma. De los progres de siempre. Animo y adelante el equipo de libertad digital en Murcia
No soy murciana, pero os leo todos los días. Es un blog muy ameno. Junto con Heterodoxias, los mejores a los que se puede acceder desde LD.
Nos hicieron esperar demasiado con la nueva canción de fondo, y la verdad, se hizo muy pesada. Pues ya es ciertamente un poco pesada de por si, así que escucharla 200 veces seguidas... ni te cuento. A mi me gustó, eso si, el vídeo del principio cunado iba a intervenir el alcalde. El caso es que no lo encuentro en Internet, he estado buscando en youtube y nada. Rajoy me pareció repetitivo, claro, que va a decir si no? ya ha dicho todo lo que va ha decir esta campaña. Me gustaron más el alcalde y Varcarcel, que aunque se explayó mucho todavía lo hizo más entretenido. De la intervención de Rajoy una anécdota como siempre, esta vez el "porqué no te callas" que levantó un aplauso en todo el hemiciclo. El caso es que Rajoy quería silencio absoluto para hablar de Gabilondo y había algún capullo por ahí que lo interrumpía, así que uno de entre el público le gritó lo del rey y destensó un poco el asunto. Por lo demás un poco cansino: desde las 20.00 hasta las 22.30 más o menos... Pero bien dentro de lo que cabe. Saludos a todos