Las ministras de Podemos Irene Montero y Ione Belarra y las del PSOE Nadia Calviño, Carolina Darias, Isabel Rodríguez, Pilar Llop, Pilar Alegría, Diana Morant y Raquel Sánchez han desfilado este martes en la manifestación "oficial" del 8-M. Con ellas han estado además, la vicesecretaria general, Adriana Lastra, y la secretaria de Igualdad, Andrea Fernández.
Desde el PSOE, Fernández ha negado que haya división en el movimiento feminista pese a la manifestación que unos metros más allá reunía a miles de mujeres contrarias a los postulados de Igualdad. "No hay división en el movimiento feminista, lo que hay son distintas formas de ver lo que está sucediendo ahora mismo, pero no hay ninguna división porque lo que tenemos claro es que el adversario es el machismo y la otra derecha", ha señalado.
Montero ha defendido lo mismo en declaraciones a los medios antes de comenzar la marcha. En su opinión, la evidente división en el movimiento feminista fruto de su gestión y con la Ley Trans como protagonista es en realidad "diversidad".
Ante la prensa, ha celebrado que "todo el mundo pueda ser quien es" y se proteja la diversidad. En su opinión, el feminismo comparte una "agenda común" que es el fin de la violencia, la corresponsabilidad y el "respeto a la diversidad". "Esa agenda común de lucha es la que no hace estar aquí hoy todas juntas, luchando por todas las mujeres", ha asegurado Montero antes de reiterar que "lo mejor que tiene España es el feminismo".
Paradójicamente, en la marcha de la "diversidad" se ha producido un incidente con disidentes cubanos que protestaban por el encarcelamiento de mujeres en Cuba. En un primer momento fueron expulsados de la marcha aunque luego se les permitió regresar. Durante la manifestación, las manifestantes coreaban lemas como "Madrid será la tumba del machismo", "Copa menstrual en la boca de Abascal" o "No es un caso aislado, se llama patriarcado".
Mientras el feminismo oficial se concentraba en Neptuno, las críticas con Montero han desfilado entre Alcalá y la Plaza de España. Según Efe, se han concentrado entre 3.000 y 5.000 personas, convocadas por el Movimiento Feminista de Madrid en contra de la Ley Trans y por la abolición de la prostitución y la pornografía.
Contra Irene Montero
Entre los carteles que llevaban los manifestantes se leían lemas como "Sexo no es género. La Constitución nos protege", "Se alquila cuerpo gestante", "Juego limpio para las mujeres", "Putero violador" e incluso un "No a la guerra, bases fuera, OTAN no".
La exdiputada del PSOE Ángeles Álvarez, miembro de la Alianza contra el borrado de las mujeres, ha justificado esta división ante la necesidad de reivindicar la "agenda del feminismo", que, a su juicio, había quedado excluidas por las organizadoras de la manifestación tradicional del 8M.
En declaraciones recogidas por La Noche de Dieter, manifestantes han pedido "la dimisión de Irene Montero" y se han mostrado contra la abolición del sexo. "Lárgate, Irene", exclamaban lamentando entre otras cosas que sus políticas den "poca importancia a la violencia machista": "Su política es poner un tuit".