Tras nueve horas reunidos en Génova e incontables voces pidiendo su marcha, el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, se enrocó en su puesto este lunes, no dimitió y se comprometió a convocar para la próxima semana a la Junta Directiva Nacional, que será la encargada de preparar, si así se acuerda, un "congreso nacional del PP ordinario o extraordinario". Extremo que el líder del PP pretende consensuar con los barones del partido a los que llamará "mañana mismo" y que se inclinan por la segunda opción para "no perder más tiempo".
Además, dos tercios de los miembros de la Junta Directiva (formada por 300 cargos) tendrán que dar luz verde a ese congreso al que Casado no aclarado si se presentará. Lo que sí que le han pedido en la reunión de este lunes numerosos cargos del partido es que para esa cita se acuerde una única "candidatura de unidad".
Esa fue la conclusión del Comité de Dirección del Partido Popular después de que hasta este órgano de fieles a Casado se rompiera entre los que apoyaron a su líder y los que optaron por mostrar su disconformidad con la estrategia seguida por el líder del PP con Isabel Díaz Ayuso en las últimas horas.
Decisión de convocar a la Junta directiva que, aseguran, se tomó "por unanimidad". Lo que no precisaron desde el PP es si Casado se presentará o no a este congreso en el caso de que se convoque el próximo lunes.
Unas horas después de este anuncio, el presidente andaluz, Juanma Moreno, se quejaba a Casado de que esa Junta iba a coincidir con el Día de Andalucía y pedía un cambio de fecha. .
El #28F es el #DíaDeAndalucía.
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) February 21, 2022
No es acertado hacernos elegir entre el día de nuestra Comunidad y la asistencia a un órgano del PP.
Las decisiones deben tomarse con tacto y sensibilidad en un momento tan crucial como éste. Es hora de saber sumar. Siempre con los andaluces.
Un día en el que se multiplicaron las críticas
El PP hacía este comunicado tras un día frenético que comenzaba a las 11 de la mañana con la reunión del Comité de Dirección convocado por el propio Pablo Casado. La idea del líder popular a primera hora ya era atrincherarse, tratar de "aguantar". Un líder popular que no compareció ante los medios tras esa larga reunión de su dirección.
Todo ello después de un día en el que los apoyos a Casado se desmoronaron. Primero, fue Alberto Núñez Feijóo el que insistió en la necesidad de convocar un congreso para sustituir a la cúpula nacional.
A estas críticas se sumaron después otros dirigentes del PP en un manifiesto en el que pidieron una gestora. Además, los que hasta hace unos días mostraban su respaldo al líder del Partido Popular, este lunes hacían malabares en sus comparecencias para no mostrar un respaldo explícito el presidente de su formación.
Dirigentes territoriales como el valenciano Carlos Mazón o el vasco Carlos Iturgaiz evitaban por todos los medios dar su respaldo a Casado en sus comparecencias públicas.
También durante la jornada de este lunes, la diputada nacional por Valencia y presidenta del Comité Electoral Nacional del PP, Belén Hoyo, que forma parte de la Ejecutiva, pedía directamente la dimisión de García Egea.
Entre los miembros del Comité de Dirección del PP que también mostraban "cara a cara" a Pablo Casado su disconformidad con la estrategia mantenida por el partido en las últimas horas estaba la portavoz en el Congreso Cuca Gamarra, Elvira Rodríguez, Dolors Montserrat, Andrea Levy o Ana Pastor.
Todo ello después de que este lunes por la mañana, el acalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez Almeida, evitase acudir a este encuentro porque "tenía que preparar el pleno de este martes en el Ayuntamiento".