La vicepresidenta de El Español y esposa de Pedro J. Ramírez, Cruz Sánchez de Lara, homenajeó en un libro a la actual presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano. En el año 2007, Cruz Sánchez de Lara coordinó la edición del volumen En Mujeres: Igualdad y libertad. Un homenaje a Enriqueta Chicano.
Según la descripción de la obra en el periódico feminista Mujeres en red, era "el sueño cumplido de su coordinadora, la abogada feminista Cruz Sánchez de Lara, de regalar palabras de igualdad y libertad a su maestra, Enriqueta Chicano. Y son palabras, artículos, de mujeres y hombres comprometidos con la igualdad, que con su lucha diaria logran que demos grandes pasos hacia la eliminación de la discriminación. Como dice su coordinadora en los agradecimientos, ‘estas palabras esperan en esta obra para penetrar en nuestros cerebros, en nuestros corazones y en nuestros discursos’".
Esta obra cuenta con 38 firmas de hombres y mujeres de relevancia pública que aportaron su visión particular de la libertad y la igualdad. Como afirma Sánchez-Lara "una suma de voluntades y apoyo que han hecho posible este homenaje" entre las que se encuentran el expresidente del Gobierno Felipe González, la expresidenta del Tribunal Constitucional María Emilia Casas, los expresidentes autonómicos José Bono y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el expresidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves, el expresidente del Senado Juan José Laborda, la exministra Leire Pajín, el exdiputado y actual vocal del CGPJ Álvaro Cuesta o la senadora socialista Micaela Navarro.
Enriqueta Chicano, actual presidenta del Tribunal de Cuentas tras el pacto alcanzado por el PSOE con el PP, es licenciada en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y Especialista en Derecho del Trabajo y fue asesora técnica en diversos ministerios. Impulsora, promotora y partícipe de investigaciones sociológicas sobre derechos humanos y mujeres.
A lo largo de su carrera ha sido vicepresidenta del Observatorio contra la Violencia de Género, miembro del Consejo de Administración del Instituto Europeo de Igualdad, representante del Ministerio de la Presidencia en el Consejo Rector del Instituto de la Mujer o miembro del Comité Nacional de preparación de la IV Conferencia Mundial de Mujeres. Durante más de una década fue la presidenta de la Federación Estatal de Mujeres Progresistas. Hoy en día, es su Presidenta de Honor.
"Quetina, una amiga del alma"
Este mismo martes, la editora de MagasIN y vicepresidenta de El Español, Cruz Sánchez de Lara, iniciaba una cadena de mujeres en este diario que se irán presentando y pasando el testigo de su admiración. La cadena comenzaba con su "amiga del alma", Enriqueta Chicano.
"Con el privilegio de ser el comienzo de la cadena, confieso mi admiración y cariño por una amiga del alma. Su nombre es Enriqueta Chicano Jávega, actual presidenta del Tribunal de Cuentas", afirmaba Sánchez de Lara.
"Enriqueta, Quetina para quienes la queremos", añadía, "creyó en mí hace veinte años –y creyó mucho más de lo que yo misma creía- e hizo todo lo posible por enseñarme algunas de las cosas importantes para poder sortear la complejidad del mundo en que vivimos. Entre sus enseñanzas me quedo con una tremendamente útil. Me enseñó a luchar en lo profesional para ganar, cuando de antemano conoces que fuerzas externas intentarán que pierdas. Aprendí que hay muchas más formas de ganar de las que yo conocía".
"El próximo jueves, en ‘Cadena de mujeres’ podrán leer el eslabón de Enriqueta Chicano Jávega. Será el primero de muchos", concluía la esposa de Pedro J. Ramírez.
Denuncias falsas de violencia de género
En el año 2016, Cruz Sánchez de Lara y Yolanda Corchado, que también participó en el libro homenaje a Enriqueta Chicano, formaron parte de la defensa de Lydia Bosch en las últimas negociaciones para intentar alcanzar un acuerdo en el controvertido caso de su divorcio con Alberto Martín. Intervinieron en la defensa técnica de la actriz en 2012, cuando hubo encuentros entre los abogados de ambas partes para cerrar algunos temas relacionados con cuestiones domésticas, como solventar la venta de la casa familiar.
Ambas fueron imputadas por alentar una trama de denuncias falsas de violencia de género. El denunciante las acusaba de presentar "denuncias falsas, realizar informes falsos". Sin embargo, medio año después, el procedimiento era archivado por el Juzgado de Instrucción nº 13 de Madrid.