El Mundo
"Yolanda Díaz renuncia a derogar la reforma laboral por salvar un acuerdo de mínimos". Vaya, la que ganaba todos los pulsos.
"La izquierda española parece haberse rendido a las bondades de una normativa de cuya capacidad para generar empleo o proteger a los trabajadores con los ERTE no dejan de presumir como si se tratara de méritos propios y no heredados." "De momento sale reforzado de esta foto el interés particular de Yolanda Díaz, quien pese a las evidentes renuncias que revela su acuerdo —en favor de las tesis de Calviño— tratará de explotar su dimensión puramente propagandística para lanzar un proyecto político personal".
Y nos están volviendo locos con la covid. "Cunden las dudas sobre la situación epidemiológica real, lo que favorece la histeria, y cunde el desconcierto ante la inacción del Ejecutivo". Cunden las dudas sobre todo. Vaya pandilla de inútiles.
Los españoles "no se merecen el lamentable espectáculo de un presidente superado por la sexta ola como por las anteriores, que desgrana confusas medidas en las que no parece creer ni él mismo, como la vuelta de las mascarillas en exteriores. Con el agravante de aducir un rigor científico que no es tal y desdiciéndose —más que matizándose— en cuestión de minutos ante la indignación suscitada". Los españoles no se merecen este presidente. Punto.
El País
"Cuatro décadas de reformas laborales". "El apoyo tripartito a la reforma laboral rompe la abusiva temporalidad y garantiza el acceso a los fondos europeos ", dice el editorial. Eso sí, "no supone ni la derogación total de la anterior ni exhibe el inmovilismo por el que clamaban otros". Vamos, que de derogación, nada.
Cómo será la cosa, que el periódico sanchista estalla y le atiza bien a Sánchez por su actitud con la ómicron que trae de cabeza a todo el mundo. "No contábamos con una ola explosiva que ya satura la atención primaria y, de momento, no colapsa los hospitales, aunque su crecimiento exponencial altera absolutamente la vida social y económica sin que existan respuestas simples ni certezas científicas incuestionables".
"En estas situaciones es cuando más necesario es el liderazgo político. Y ni el Gobierno central ni la mayoría de las comunidades autónomas han olido el grado de frustración, susto y desamparo que el estallido de positivos ha provocado". Eso, a repartir culpas.
De la alocución dominical del presidente del Gobierno durante la fase aguda hemos pasado al discurso machacón de un Pedro Sánchez sin escuderos con empatía —ni Fernando Simón ni Salvador Illa— sobre que estamos vacunados y esa es la solución".
"Hace falta liderazgo político para gestionar una situación en la que hay que ponderar los factores de salud pública, situación hospitalaria, economía y estado de ánimo social. No es fácil, pero deberían probar a explicarlo sin tratar a sus gobernados como electores menores de edad. Sin despreciar como síntoma la reacción a la imposición de la mascarilla en exteriores, algo que muchísimos españoles hacen voluntariamente y que, presentada como medida estrella en estas circunstancias, ha provocado una enorme irritación". Jo, Pedro, te han dado la Nochebuena. Aunque a este, mientras tenga su Falcon disponible, se la trae floja todo.
ABC
"El pánico al contagio deja las farmacias sin test de antígenos hasta el 3 de enero". "Pese al fomento del autodiagnóstico, algunas empresas los vendieron a Alemania y Polonia porque en España no los solicitaban". Ya estamos otra vez como al principio con las mascarillas y los respiradores. ¿Pero se puede ser mas inútil que este Gobierno?
Dice Carrascal que "está visto que nadie quiere cargar con la responsabilidad de molestar al electorado, sobre todo en fechas tan señaladas como las Navidades, y si los barones regionales no quieren cargar con el sambenito de aguar las fiestas, el presidente lo quiere menos". A este le da igual todo.
En cuanto a la reforma laboral, dice el editorial que "En ningún caso se trata de la derogación que textualmente prometieron el PSOE y Podemos tanto en sus programas electorales como en su pacto de coalición. Tal derogación era materialmente imposible, y es evidente que se trataba de un mantra propio de la izquierda para cultivar un relato falso con el único objetivo de mantener esperanzada y contenta a su propia parroquia ideológica". "Se han impuesto la lógica y el realismo frente a la jactancia de una izquierda mitinera y sobreactuada". Mucho larala y poco lirili.
La Razón
"Garamendi se entrega a Díaz y apoya la reforma laboral". "Con todas las cautelas que se quieran aducir, nos hallamos ante una moción de censura moral contra Garamendi, que, sin duda, tendrá consecuencias", dice el editorial, contra la opinión del resto de periódicos. "Antonio Garamendi ha preferido la componenda con un Gobierno que había hecho bandera de una reforma contraproducente, innecesaria y de tintes políticos revisionistas. En definitiva, un error injustificable." A ver si nos aclaramos.
"Sánchez prioriza la economía en la sexta ola". Sandra Golpe escribe desde la cama con covid. "A Pedro Sánchez, sus propios socios de Gobierno le acusan de gestionar la situación a base de improvisaciones. Y tampoco se percibe demasiada coordinación entre las comunidades autónomas. Esto es un sálvese quien pueda, en toda regla. Una vez más, los tribunales empiezan a tomar aquellas decisiones que les corresponderían a los políticos". "Así las cosas, nos hemos ido todos como locos a comprar antígenos y pcr, no vaya a ser que contagiemos a los nuestros en un descuido, y se nos han agotado en dos días". Dejà vu. Cuídate Sándra, nadie lo va a hacer por ti. Tras vacunarme ayer me he levantado con fiebre y dolor de cabeza. Chica previsora, tenía test. Negativo. No ganamos para sustos.