Comisiones Obreras y UGT formarán parte de la manifestación convocada para el próximo sábado por la plataforma Som Escola (Somos Escuela) en contra de la aplicación de las resoluciones judiciales favorables a impartir un 25% de clases en español en las escuelas de Cataluña. Dicha plataforma agrupa a entidades separatistas como Òmnium Cultural, los dos sindicatos referidos más fuerzas sindicales de sesgo independentista y ha convocado una protesta alentada por la Generalidad y los partidos separatistas a fin de mantener el monolingüismo y el sistema de adoctrinamiento en lo que denominan "escola catalana".
La protesta se gestó a raíz de la medida cautelar del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) para que se imparta un 25% de español en una clase de P5 en el colegio de Canet de Mar (Barcelona) Turó del Drac (Colina del Dragón) y de la confirmación por parte del Tribunal Supremo de otra sentencia del TSJC que obliga a introducir un 25% de horas lectivas en español en todo el sistema educativo catalán. La confluencia de ambas resoluciones sirvió a la Generalidad y los partidos que la sustentan para articular una protesta cuyo primer jalón fue el acoso a la familia de Canet que ha reclamado clases de español para su hijo de cinco años.
Se niegan a condenar el acoso
Tanto UGT como CCOO se han mostrado en todo momento partidarios de la protesta y se han negado a condenar la campaña de amedrentamiento, insultos, amenazas y señalamiento llevada a cabo contra la familia de Canet de Mar, en línea con lo orquestado por la Generalidad, que utiliza a dicha familia como cabeza de turco para evitar que más familias se atrevan a pedir la inclusión del castellano en el sistema educativo. Además, desde las direcciones de ambas centrales se han emitido juicios a favor de la inmersión lingüística, que se ha llegado a tachar de "logro de las clases trabajadoras".
Además de formar parte de la plataforma separatista Som Escola, ambos sindicatos se han alineado durante todo el proceso catalán con las tesis independentistas y fueron instigadores de la huelga celebrada el 3 de octubre de 2017, dos días después del referéndum ilegal. El secretario general de UGT en Cataluña, Camil Ros, está vinculado a ERC, partido del que dirigió a sus juventudes. Javier Pacheco es el secretario general de CCOO en Cataluña, cargo al que accedió pocos meses antes del golpe de Estado separatista.