El uso de un blindado BMR en los disturbios que se están produciendo en Cádiz con motivo de la huelga en el sector del metal ha abierto una herida entre los dos partidos que sostienen al Gobierno de Pedro Sánchez. Los aliados del PSOE consideran que el Ministerio del Interior está empleando un medio aparentemente desproporcionado para tratar de controlar los incidentes que están provocando los trabajadores.
La realidad es muy diferente. Los blindados que posee la Policía Nacional no tienen ningún tipo de armamento que pueda ser empleado contra los huelgistas -como han dejado entrever de forma interesada algunos de los partidos de extrema izquierda del arco parlamentario- y sólo pueden ser empleados como protección de los efectivos del cuerpo que van de avanzadilla quitando las barricadas con las que se están cortando las calles.
La Policía cuenta en estos momentos con, al menos, dos BMR (Blindado Medio de Ruedas) que provienen del Ejército de Tierra. Un vehículo que fue muy útil en la década de los noventa en escenarios bélicos como la antigua Yugoslavia o Irak, pero que hace tiempo que está absolutamente obsoletos para los tiempos actuales. Es por ello que el Ejército trata de retirarlos del servicio según va incorporando blindado mucho más modernos.
Se trata de unidades del BMR 600 M1 sin modernizar. Antes de su entrega al cuerpo policial se les retiró la ametralladora M2 de 12,70 mm, es decir, se entregados totalmente desarmados. Luego la Policía se encargó de darles una mano de pintura azul corporativo en el exterior, añadirle los emblemas del cuerpo y la UIP, y rematricularlos. La presentación en sociedad fue durante el acto central de la Fiesta Nacional de 2017. Allí desfiló uno por primera vez.
Desde entonces su uso ha sido más bien limitado para lo que se podría haber empleado. Uno de estos BMR ha estado de forma casi permanente dando seguridad estática a la embajada de Estados Unidos en Madrid. Ni pese a la vigente amenaza terrorista se le ha dotado de ningún tipo de armamento que pudiese ser ofensivo. El blindaje sirve de protección para los agentes que custodian de forma permanente la delegación diplomática.
La de Cádiz es la primera vez que se ve en acción a estos BMR porque así lo ha permitido el Ministerio del Interior. Los sindicatos policiales ya demandaron su uso durante los disturbios que los independentistas provocaron en Cataluña en el año 2019, pero el Gobierno no lo usó pese a la extrema gravedad de los hechos y la multitud de agentes que resultaron heridos de los mismos. Dos de esos heridos han tenido que dejar el cuerpo por las lesiones sufridas.
Para aquella ocasión, la Policía desplazó tanto un vehículo BMR como el camión antidisturbios con lanzadera de agua, pero ninguno de los dos llegó a entrar en acción. Los BMR también se movieron este verano a Sevilla para dar seguridad a los partidos de la Eurocopa de fútbol que se celebraron en la capital andaluza. Junto a él fue también uno de los URO Vamtac blindado que tiene entre su parque automovilístico la Policía Nacional.
¿Conoces los BMR y los URO de la Unidad de Intervención Policial de @policia ?
🚔🚨🚔 Estos vehículos pesados están asignados a tareas de seguridad ciudadana y a la protección de masas en grandes eventos públicos pic.twitter.com/QGe0W6JhlH
— Policía Nacional (@policia) June 23, 2021
Las características de este tipo de vehículos también son muy útiles para otro tipo de misiones policiales. Por ejemplo, para proteger a los agentes durante operaciones antiterroristas o asaltos a edificios en entornos urbanos, pero todavía no ha habido confirmación desde la Dirección General de la Policía de que se hayan utilizado en estas labores por agentes de la propia UIP o por los GEO (Grupo Especial de Operaciones).