El ya exobispo de Solsona Xavier Novell habría renunciado al cargo debido a una relación sentimental con una mujer. Así lo indica el portal de información religiosa Germinans, que en su última entrada asegura que Novell se habría convertido en "un juguete roto, presa fácil para su actual novia".
En dicha información, titulada "La novia de Novell y la soledad de Novell", se indica también que "al menos ha tenido la delicadeza y prudencia de salir de su diócesis e instalarse en una ciudad de la que no era obispo". "Salvo un milagro —se añade en la crónica—, la suerte está echada, se ha perdido una teórica gran promesa de la Iglesia catalana, no supo gestionar bien todas las cualidades que tenía y su inicial éxito mediático".
Un secreto a voces
Que Novell tenía novia era uno de los rumores más extendidos en relación a su sorprendente renuncia y la rápida aceptación por parte del Vaticano. El pasado 23 de agosto, una nota del propio obispado anunciaba una "dimisión" presentada en la Santa Sede "libremente por razones estrictamente personales, en conformidad a cuanto se contempla en el canon 401 §2 del Código de Derecho Canónico".
El enunciado de ese punto es: "Se ruega encarecidamente al Obispo diocesano que presente la renuncia de su oficio si por enfermedad u otra causa grave quedase disminuida su capacidad para desempeñarlo".
La nota del obispado apuntaba además que "Mons. Novell ha tomado la decisión después de un período de reflexión, de discernimiento y de oración, al término del cual ha espontáneamente presentado al Santo Padre su propia situación y su dimisión al gobierno pastoral de la diócesis de Solsona".
La posibilidad de una enfermedad fue descartada desde el primer momento. En algunos medios se especuló con algún tipo de desequilibrio mental de Novell, pero al poco cobró fuerza la hipótesis de una relación sentimental con una mujer.
Un obispo polémico
Novell, de 52 años, fue nombrado obispo con tan solo cuarenta años, siendo en aquel momento, 2010, el más joven de España. El exprelado se caracterizó por su credo separatista y por sus consideraciones sobre la homosexualidad, que atribuía a la carencia de la figura paterna.
Medios progresistas creyeron intuir en ese tipo de expresiones en contra de la homosexualidad o en obras sobre el aborto y la eutanasia la causa de una renuncia que habría sido inducida por el Vaticano. Sin embargo, la existencia de una relación sentimental descuadra esas explicaciones.