Cuixart, acusado de "botifler" y "machirulo" por quitarle el micro a Colau

Es el tema del día. Jordi Cuixart, el líder golpista de Òmnium, está recibiendo todo tipo de críticas. Algunos le acusan de poco independentista o directamente de españolista. Otros censuran la actitud machista implícita en interrumpir a la alcaldesa Ada Colau para "salvarla" de los abucheos. Por el lado independentista, la diputada de Junts per Catalunya (JxCat) Aurora Madaula ha cargado contra Cuixart en la red social Twitter en los siguientes términos: "No. Las luchas compartidas son por la libertad. Para poder silbar, criticar o no votar a quien no te gusta. Para silbar, abuchear y denunciar a los que para asaltar los cielos abren las cloacas y pactan con la extrema derecha. Silbemos hasta que se queden sordos".

Ese mensaje ha sido acogido con gran entusiasmo por un sector del separatismo que considera que Cuixart es poco de fiar desde que se abrazó con Miquel Iceta poco antes de recibir el indulto de Pedro Sánchez. Los calificativos han ido de "españolista" a "botifler" (la versión catalana del término traidor) en las respuestas al mensaje de Madaula.

En cuanto al comportamiento machista de Cuixart, la diputada del PP Pilar Marcos ha deslizado el siguiente comentario: "Cuixart y la escuela de nuevas masculinidades de Colau".

El expresidente de Sociedad Civil Catalana Josep Ramon Bosch también ha acentuado la "gentileza" de Cuixart: "Y sale el macho alfa Cuixart a defender a la pobre mujer Ada Colau. Esto es machismo. Esto".

El concejal del PP Óscar Ramírez ha destacado que "Lo del pregonero sedicioso Jordi Cuixart… es heteropatriarcado en toda su plenitud, oye!!!"

El eurodiputado de Ciudadanos Jordi Cañas se preguntaba a su vez: "¿Esto vale como ejemplo de "machirulo"?"

Nacho Martín Blanco, diputado en el Parlament de la formación naranja, ha reparado en que Cuixart reparte carnets de catalán: "'Formamos parte de un mismo pueblo', dice Cuixart en defensa de Colau, que llora conmovida ante tanta generosidad. Lo dramático es que se asuma con naturalidad que Cuixart reparta carnés de buen catalán, sabiendo que así se excluye a millones de catalanes. Una locura... de masas".

En la red social circula una versión extendida del vídeo en la que Ada Colau vuelve a coger el micro tras la intervención de Cuixart, reclama respeto por la libertad de expresión y trata de congraciarse con el público que le abuchea hablando de la experiencia carcelaria del dirigente golpista.