El Ministerio del Interior ha dado la orden de iniciar la repatriación de buena parte de los cerca de 800 menores que entraron en la ciudad de Ceuta durante la crisis migratoria de mayo con la que el Gobierno de Marruecos trató de desestabilizar al Gobierno español. Una situación que se produjo con el objetivo de forzar a España a reconocer la marroquinidad del Sáhara Occidental aprovechando la hospitalización en territorio español del líder del Frente Saharaui.
Fuentes policiales han confirmado a Libertad Digital que un dispositivo de la Policía Nacional se ha desplazado hasta el polideportivo Santa Amelia de la ciudad autónoma, donde estaban acogidos unos 230 menores no acompañados (menas), porque no tenían espacio físico en el centro de acogida, y que han empezado a ser organizados en grupos reducidos para proceder a su devolución al país alauí.
Se les está configurando en grupos de 15 menores y se les está acercando al paso fronterizo de El Tarajal en minivan o grandes furgonetas, donde están siendo entregados a las autoridades del país vecino, que los aceptan sin problema alguno. Las mismas fuentes han explicado que el primer grupo de menores ha sido entregado sobre las 14.30 horas y que el procedimiento se seguirá realizando durante toda la tarde de este viernes.
El protocolo acordado entre España y Marruecos especifica que una vez que estos menores son entregados a las autoridades del país vecino, serán éstas las que realicen todos los trámites administrativos necesarios para que estos menores no acompañados puedan volver a reunirse con sus familias que, en la gran mayoría de los casos, no tuvieron conocimiento de que sus hijos habían pasado a España alentados por su propio Gobierno.
Las fuentes policiales consultadas han especificado que la orden de repatriación corresponde específicamente a los menores procedentes de Marruecos y que, en ningún caso, se está incluyendo en este proceso de devolución a ningún menor vulnerable ni que provenga de algún país que no sea el propio Marruecos.
La posible devolución de los menores no acompañados de origen marroquí que llegan a nuestro país está recogida en un convenido firmado entre España y Marruecos en el año 2012 -con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno-, pero no se estaba haciendo efectivo hasta ahora porque las autoridades alauís se estaban negando.