El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha anunciado este viernes que el Gobierno va a proceder a repatriar al personal de la Embajada en Afganistán, los españoles que aún queden en el país, y a aquellos afganos y sus familias que han trabajado con las tropas y cooperantes españoles en los últimos años.
"España está preparada para cualquier eventualidad, incluida la evacuación de la Embajada si fuera necesario y no va a dejar a nadie atrás", ha asegurado el ministro en un comunicado, en el que ha expresado su preocupación por el deterioro de la situación en el país, ante el imparable avance de los talibán hacia Kabul.
Actualmente, según Exteriores, en Afganistán permanecen, además del personal de la Embajada, seis españoles, los cuales se encuentran todos en Kabul con la excepción de un funcionario internacional protegido por su organización. El Ministerio había recomendado esta semana la salida del país en vuelos comerciales mientras fuera posible. En la Embajada, según fuentes diplomáticas, permanecen el embajador saliente, Gabriel Ferrán, su segundo y los policías que se ocupan de la seguridad.
"Desde la Embajada de España en Kabul se está en contacto permanente con todos ellos", ha indicado el ministro, que ha precisado que cualquier español que aún siga en el país "tiene la posibilidad de incorporarse a la operación de evacuación que pueda organizarse por parte del Gobierno".
"Su seguridad es nuestra primera preocupación", ha recalcado el ministro, que no ha ofrecido más detalles sobre cómo o cuándo se prevé llevar a cabo dicha operación de evacuación desde el país asiático.
Según ha indicado Exteriores, España está coordinando junto con sus socios y aliados en el marco de la Unión Europea y la OTAN una respuesta que asegure la protección de nuestros intereses en Afganistán en beneficio del pueblo afgano.
"Somos conscientes de la necesidad de amparar, en coordinación con el resto de estados miembros de la Unión Europea y de la OTAN, a aquellos afganos y sus familias que han trabajado codo con codo con nosotros", ha afirmado Albares, en referencia principalmente a los traductores que apoyaron a las tropas españolas y los trabajadores de AECID en los últimos años.
En este sentido, Exteriores ha precisado que junto con Defensa y los ministerios del Interior y de Seguridad Social y Migraciones está trabajando para coordinar el traslado de estos ciudadanos afganos. "No se va a dejar a nadie atrás", ha prometido Albares.
Así las cosas, el ministro ha advertido de que España no reconocerá un Gobierno impuesto por la fuerza y ha reclamado una vez más la reanudación de las negociaciones entre el Ejecutivo afgano y los talibán y un alto el fuego completo y permanente.
Albares también ha manifestado su gran preocupación por las graves consecuencias sobre la población que tiene el avance de los talibán, que en el último día se han hecho con el control, entre otras de la segunda y la tercera ciudad del país, Kandahar y Heart.
"Condenamos las crecientes violaciones del Derecho Internacional humanitario y los Derechos Humanos, en particular en las zonas y ciudades controladas por los talibán", ha manifestado.