El presidente de la Generalidad, Pere Aragonès, ha montado una comparecencia institucional para dar cuenta del nuevo toque de queda entre la una y las seis de la madrugada en gran parte de Cataluña. La medida es una copia de la adoptada por el Gobierno de la Comunidad Valenciana, que ha impuesto la prohibición de salir a la calle por la noche en 32 municipios de la región.
El toque de queda en Cataluña se suma al cierre de todos los establecimientos a las 00:30 horas y hasta las 06:00 horas así como la limitación de las reuniones sociales a un máximo de diez personas, medidas aprobadas por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
"El Gobierno de la Generalidad, después de hablar con el mundo local, ha decidido decretar un toque de queda en las localidades de más de cinco mil habitantes, que es donde más impacto está teniendo la pandemia. La situación es muy delicada, extremadamente frágil. Se trata de 158 municipios que congregan a la mayoría de la población de Cataluña", ha declarado Aragonès.
"Es una medida necesaria, clave para frenar la presión de la epidemia sobre el sistema sanitario. Se trata de evitar restricciones mayores que puedan tener un mayor impacto económico y emocional", abundó el segundo de Oriol Junqueras.
"He tenido la oportunidad de hablar con alcaldes y alcaldesas y hemos acordado que es necesario complementar las medidas ya en vigor con un confinamiento nocturno que reduzca las interacciones sociales entre grupos de población que todavía no están vacunados. El toque de queda nos ayudará a evitar las prácticas que contribuyen a la extensión del coronavirus", ha dicho también.
Aragonès reiteró que quedan bajo este toque de queda todas las ciudades de más de cinco mil habitantes y aquellas localidades en las que haya una incidencia acumulada de más de cuatrocientos casos por cien mil habitantes en los últimos siete días.
El toque de queda entrará en vigor el fin de semana, salvo que el TSJC resuelva lo contrario. La duración será de siete días prorrogables en función de los datos de la pandemia en Cataluña, que de momento no sólo son los peores de España sino de toda la Unión Europea.