Alvise Pérez ha dicho en Es la Mañana de Federico sobre la censura que supone Newtral que "no sólo Facebook, también Instagram y Twitter quieren ver cómo censuran, es un cáncer que se extiende". "A veces se dice eso de que hay verificadores mejores que otros, pero lo cierto es que no tienen ningún tipo de independencia, como Maldito Bulo, que quiso comprarlo Ana Pastor y se negaron".
El analista ha asegurado sobre el juicio que tiene pendiente con Newtral que "te ponen un sello en la frente de que todo lo que dices es falso". Sobre el litigio con el medio de verificación de Ana Pastor, ha dicho que "es una demanda de 79 páginas por dañar la imagen pública de Ana Pastor pero no niega ninguna de las informaciones que publicamos como que la hermana de Pastor está colocada a dedo por el PSOE". "El juez tumba las medidas cautelarísimas y ahora tenemos la vista preliminar y se valorará si hay juicio o no", ha añadido.
Y ha criticado que "esto se traduce en una señora que vende su versión en muchos canales de radio y televisión pero nosotros no tenemos el más mínimo eco mediático en esos mastodontes mediáticos para defendernos".
Para Alvise lo que hacen estos verificadores es "una censura bastante invisible" y ha criticado que "eliminan las pruebas de lo que decían y no puedes decirles que mienten; si haces una captura, te dicen que es falsa o que está descontextualizada". Sin embargo, el analista cree que la derecha no debería entrar en "el juego peligroso" de crear verificadores. Sobre La Sexta ha dicho que "tiene una falsa pluralidad" y que "Ferreras utiliza sus programas para decir que soy el vertedero de la derecha digital".
La cortina de humo sobre Juan Carlos I
El analista se ha mostrado muy crítico con algunos políticos de la derecha como el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, por dar "40.000 euros a Maldito Bulo por hacer cursos de formación contra la desinformación". Cree que "hay un negocio de extorsión que, si tú pagas, no se te ataca, o se desinforma menos sobre ti".
También ha señalado que hay "una estrategia para intentar imputar judicialmente al rey Juan Carlos lo antes posible y utilizarlo como bomba de humo para blanquear los indultos en Cataluña u otros individuos que tuvieron que ver con el golpe de Estado pero que no salen en los medios".