Primera fase concluida. El Ministerio del Interior ha terminado este jueves la primera ronda de los acercamientos de los terroristas de ETA que cumplen condenado a centros penitenciarios del País Vasco o Navarra o más próximos a estas regiones que en aquellos en los que venían cumpliendo su pena. En las últimas horas ha aprobado los últimos movimientos, que incluye a los cinco terroristas que todavía no habían cambiado de prisión desde junio de 2018.
Estos últimos acercamientos han sido confirmados esta mañana por la Dirección General de Víctimas del Terrorismo, que depende del departamento de Fernando Grande Marlaska, a las principales asociaciones de víctimas. Desde que Pedro Sánchez llegara a La Moncloa se han producido 247 movimientos, que corresponden, exactamente, a diferentes cambios de prisión de 201 terroristas de ETA presos.
La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) ha denunciado que el Gobierno está acabando a pasos acelerados con la política de dispersión y ha asegurado que "Pedro Sánchez ya puede presumir ante sus queridos socios de Gobierno de EH Bildu de que ha cumplido una de las reivindicaciones históricas de ETA: ha acercado a todos los presos de la banda terrorista ETA. Todos los presos se encuentran ya en prisiones de Madrid hacia arriba".
"Los ha acercado a todos, hoy incluso a Iñaki Bilbao, famoso por amenazar a jueces durante los juicios y autor en 2019 de la frase ‘si me dieran otra oportunidad en esta vida, cogería un arma y retomaría la lucha armada aunque fuera solo’. No es ya sólo que no se exija la colaboración con la justicia para comprobar que están arrepentidos, es que hoy directamente ha acercado a un preso que ha manifestado su voluntad de volver a asesinar", dice la asociación.
"Hoy se ha dado por finiquitada la política de dispersión, una medida que se ha demostrado efectiva a lo largo de estos 34 años. La política de dispersión, de hecho, se empezó a aplicar en el año 1987 precisamente buscando facilitar la reinserción de los etarras, ya que se había comprobado que la política de agrupamiento de este tipo de presos en algunas prisiones facilitaba que la organización terrorista ETA mantuviera un control férreo sobre sus presos imposibilitando cualquier signo de disidencia o reinserción", añaden.
Los más llamativo es que el Gobierno ha acercado también a los seis presos que pertenecen a ATA (Amnistia Ta Askatasuna), una escisión de ETA y su brazo político que insiste en volver a las armas de manera inmediata. Una escisión peleada con EH Bildu y por cuyos presos EH Bildu no va a mover un dedo.
Los siete presos de ETA cuyo traslado se ha aprobado este jueves son Ignacio Javier Bilbao Goicoetxea, Daniel Pastor Alonso, Jon Zibuaurre Aguirre, Jesús María Echevarría Garaicoechea, Oscar Barreras Díaz, Andoni Murga Zenarruzabeitia y Liher Aretxabaleta Rodríguez.
Ignacio Javier Bilbao Goicoetxea. De la cárcel de El Puerto III (Cádiz) a la de Topas, en Salamanca. En 2004 la Audiencia Nacional le condenó a 52 años de prisión como autor del asesinato de Juan Priede Pérez. También ha sido condenado en varias ocasiones por amenazar de muerte a jueces como Garzón, Teresa Palacios y Fernando Andreu.
Daniel Pastor Alonso. De la cárcel de Puerto III (Cádiz) a la de Zuera (Zaragoza). En 2013 la Audiencia Nacional le condenó a 485 años por el asesinato de Luis Conde de la Cruz. Ese mismo año fue condenado a 45 años de prisión por el atentado que acabó con la vida de Eduardo Antonio Puelles García. Además, en 2013 la Audiencia Nacional le condenó a 3.860 años de prisión por colocar la furgoneta bomba que estalló frente a la casa cuartel de Burgos en la madrugada del 29 de julio de 2009 y que dejó 160 heridos de diversa consideración, entre ellos 41 niños.
Jon Zibuaurre Aguirre. De la cárcel de Burgos a la de Zaballa (Álava). Fue condenado en 2003 por la Audiencia Nacional a 97 años de prisión como responsable del asesinato de Iñaki Totorika Vega el 9 de marzo de 2001. Cumplirá las tres cuartas partes de la pena en septiembre de 2023.
Jesús María Echevarría Garaicoechea. De la cárcel de El Puerto III (Cádiz), a la de León. En 2005 la Audiencia Nacional le condenó a 26 años de prisión como autor del asesinato de Antonio Molina Martín.
Oscar Barreras Díaz. De la cárcel de El Puerto III (Cádiz) a la de Logroño. En enero de 1999 la Audiencia Nacional le condenó a la pena de 35 años de prisión como responsable del atentado que acabó con la vida de Luis Andrés Samperio Sañudo.
Andoni Murga Zenarruzabeitia. De la cárcel de Zaragoza al de Martutene (San Sebastián). Ingresó en prisión el 18 de agosto de 1996 y cumple una condena de 25 años por atentado, banda armada, colaboración con banda armada, tenencia de explosivos y depósito y tráfico de armas. Cumplió las tres cuartas partes de la condena en mayo de 2015, formaba parte del grupo Sugoi de ETA y fue condenado por la colocación de una bomba en una empresa, causando grandes destrozos pero no heridos. También se le acusó de haber realizado gestiones para el cobro del llamado impuesto revolucionario.
Liher Aretxabaleta Rodríguez. De la prisión de Burgos a la de Zaballa (Álava). Fue condenado por la Audiencia Nacional en 2017 a 535 años de prisión como autor de un atentado con una furgoneta bomba en el distrito madrileño de San Blas el 25 de mayo de 2005 que hirió a 45 personas, de las cuales, 14 de ellas eran policías. Cumplirá las tres cuartas partes de la condena en julio de 2046.