Los cazas de combate Eurofighter Typhoon del Ejército del Aire desplegados en Lituania han entrado en acción en las últimas horas. El Estado Mayor de la Defensa (EMAD) y el Comando Aéreo de la OTAN han confirmado este lunes que dos aparatos españoles tuvieron que salir en misión de intercepción durante este fin de semana para controlar la presencia de un avión de alerta temprana Ilyushin A-50 Beriev de la Fuerza Aeroespacial de Rusia.
El aparato estaba atravesando el espacio aéreo de la pequeña república báltica incumpliendo las leyes internacionales de navegación aérea, exactamente, volando con el transpondedor apagado y sin un plan de vuelo notificado. Algo que suelen ser habitual cuando los militares rusos vuelan desde su territorio nacional hacia el exclave ruso de Kaliningrado y viceversa, obviando además la soberanía aérea tanto de Lituania como de sus vecinas Letonia y Estonia.
Los cazas españoles despegaron desde suelo lituano y se aproximaron al avión de alerta temprana ruso para hacerle saber a la aeronave que no estaba cumpliendo con la legalidad vigente. Así mismo, tomaron nota del tipo de aeronave que era y de los datos de la misma. El EMAD ha destacado que desde que se realizó el aviso hasta que los cazas españoles levantaron sus ruedas del suelo apenas pasaron 15 minutos.
La misión española en este país comenzó el pasado 1 de mayo y concluirá a finales de julio. Está formada por siete cazas Eurofighter Typhoon, que forman parte del Ala 14, con sede en la base aérea de Los Llanos (Albacete), aunque durante este trimestre estarán en Siauliai, al norte de Lituania. El destacamento está formado por 130 militares, entre pilotos, mecánicos, armeros y otro personal militar esencial para este tipo de despliegues.
El objetivo de esta misión de la OTAN es doble. Por un lado, reforzar las capacidades de control del espacio aéreo de las tres pequeñas repúblicas bálticas –estarán apoyados por cazas F-35 italianos, ubicados en Ämari (Estonia)–, que no poseen capacidad para hacerlo por ellas mismas. Por el otro, controlar las posibles amenazas de la Fuerza Aeroespacial de Rusia y sus habituales incursiones incumpliendo la legalidad aérea.