El Gobierno balear señala dos veces a los alumnos que piden hacer el examen de selectividad en español, según denuncia ABC. Primero, tienen que levantar la mano y pedir una copia en la lengua oficial del Estado, ya que se entrega por defecto en catalán, y después, cuando se les da la copia en color amarillo para diferenciarlos del catalán, que es blanco.
El mecanismo para garantizar los derechos de los alumnos en la Prueba de Bachillerato de Acceso a la Universidad (PBAU), la antigua selectividad, se implantó en 2017 a instancias de Ciudadanos Baleares, dirigido entonces por Xavier Pericay.
Sin embargo, la discriminación por razón de lengua sigue de facto, ya que los alumnos que quieren hacer la prueba en catalán no tienen que significarse. "Es una forma de señalar, más si cabe al que elige castellano", denuncian varios alumnos a ABC, que creen que esta diferenciación les "estigmatiza".
La Universidad de las Islas Baleares (UIB) alega que el examen de castellano amarillo "facilita" la tarea a los profesores voluntarios que supervisan las pruebas. Al parecer, si el folio fuera blanco, como el catalán, les impediría distinguir si el examen está escrito en catalán o en español.
A esta polémica se suma la llamativa errata que contenía el encabezamiento del examen de español, denunciado en redes sociales, entre otros por el eurodiputado José Ramón Bauzá: "Lengua i Literatura Castellana".
"La inmersión lingüística en Baleares no genera ningún problema, todos hablan y escriben perfectamente en español". pic.twitter.com/X8iSQinJWw
— José Ramón Bauzá 🇪🇺 (@JRBauza) June 10, 2021
El Gobierno de la socialista Francina Armengol se resiste a obedecer a los tribunales y garantizar los derechos de los alumnos castellanohablantes de las Islas y la universidad aplica el mismo procedimiento que en Cataluña, donde la Generalidad elabora listas con los alumnos que piden examinarse de la Selectividad en español.