La portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Macarena Olona, ha vuelto a convertirse este miércoles en el auténtico azote del ministro del Interior. A él le ha acusado de ser la pieza angular sobre la que ha girado la estrategia gubernamental de generar y justificar diversos actos de violencia contra Vox en campaña electoral para, posteriormente, culpar a esta formación política de la violencia que había sufrido.
"Fernando Grande Marlaska, hoy comparece ante esta Cámara para rendir cuentas ante el pueblo español y seré yo quien ejerza la acusación. Los cargos contra usted son de una extrema gravedad. Como ministro del Interior ha sido pieza clave en la ejecución de un plan que, tanto en su ejecución como en sus resultados, responde con claridad al concepto normativo de violencia política", ha iniciado Olona su intervención.
"Hay una intención y unos objetivos políticos, se causan unos daños de carácter político y tras la violencia se esconde una pretensión de reforma, de cambio, de revolución. La violencia es simplemente un instrumento al servicio de unos fines. En este caso, provocar un cambio político y social que permitiera a las fuerzas de la izquierda hacerse con el Gobierno de la Comunidad de Madrid", ha continuado.
La portavoz parlamentaria de Vox ha recordado que Podemos, uno de los partidos que forma parte del Gobierno, llamó públicamente a boicotear el acto de inicio de campaña electoral de su partido en Vallecas el pasado 7 de abril, a lo que rápidamente se unieron diversos grupos de extrema izquierda, entre ellos, Bukaneros, el grupo ultra de aficionados del Rayo Vallecano, conocido por su extrema violencia y los múltiples incidentes que ha generado.
Ha denunciado la existencia de un informe de la Brigada de Información de la Policía Nacional en Madrid que avanzaba la posibilidad de que hubiera disturbios graves, motivo por el que se puso en marcha un Centro de Coordinación policial (CECOR), se mandó un helicóptero a la zona e, incluso, el Jefe Superior de la Policía Nacional de Madrid interrumpió sus vacaciones para estar al frente del CECOR, pese a lo que se mandaron poquísimos agentes al acto.
Olona ha acusado a Marlaska de no tener interés en proteger a los policías que fueron a dar seguridad al acto y ha recordado que la ministra de Igualdad (Irene Montero) y la de Derechos Sociales (Ione Belarra) justificaron la violencia. "El Gobierno justificó la violencia. Desde el Consejo de Ministros se incitó y se justificó la violencia contra Vox. Sánchez dijo que fuimos a Vallecas a provocar. Fuimos víctimas de la violencia política instigada contra Vox", ha dicho.
El montaje de las cartas amenazantes
Las cartas amenazantes con balas que recibieron algunos miembros del Gobierno –hay que recordar que también se interceptó una contra Isabel Díaz Ayuso– también formaban parte del plan gubernamental, a juicio de la diputada de Vox. "Utilizaron las cartas de amenazas con balas para justificar la violencia contra Vox. Nos acusaron de ser responsables del envío de esas amenazas. Pasamos del ‘socialismo o libertad’ al ‘fascismo o democracia’", ha continuado.
Ha recordado, asimismo, que la ministra de Industria, Reyes Maroto, acusó a su partido de ser responsable de una carta amenazante que recibió, que incluiría una navaja con motas de pintura roja, y que, pese a que se detuvo a un hombre con problemas de esquizofrenia por haber enviado la misma, "el Gobierno mantuvo su montaje de que Vox era una amenaza contra la democracia".
La portavoz de Vox ha censurado que en esa campaña de cartas amenazantes el presidente Pedro Sánchez dijo que Vox había cruzado una línea roja. "Ese día Sánchez ya sabía desde hace por lo menos 10 días que se había detenido a los falsos escoltas de Iglesias" por la agresiones en Vallecas, pero según ha denunciado, lo importante era continuar con la campaña de acoso contra su partido.
"¿Hasta dónde están dispuestos a llegar con su violencia contra Vox?", ha preguntado Olona, tras lo que ha recordado el debate parlamentario previo al asesinato de José Calvo Sotelo en 1936, después de varias amenazas en el Congreso de los Diputados, y que terminó siendo tiroteado por uno de los escoltas de Indalecio Prieto, que entonces era el máximo dirigente del PSOE.
Marlaska calla sobre las detenciones
El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha mantenido durante sus intervenciones una misma estrategia, la de vincular a Vox con la extrema derecha, situarle fuera de los consensos constitucionales, hacerle responsable de los actos de violencia que ellos mismos han sufrido y mostrarse como la víctima de una campaña de acoso que están llevando a cabo el PP, Vox y "lo que queda de Ciudadanos".
Eso sí, ha preferido no decir nada real sobre la razón por la que el Ministerio del Interior no informó públicamente de que entre los detenidos por los disturbios de Vallecas estaban dos miembros de la guardia pretoriana de Pablo Iglesias, a sueldo de Podemos y uno de ellos miembro de Bukaneros. Se ha limitado a decir que no podía decirlo por la presunción de inocencia, la ley de protección de datos y porque era una operación judicial.
Olona ha sido tajante a la hora de responder a estas excusas. "Insulta a nuestra inteligencia. Interior informa de manera habitual de las detenciones que se realizan. En abril de 2020, usted acusó públicamente en una emisora de radio, de forma falsa, a un hombre de asesinato. Quebró todos sus derechos", le ha echado en cara.
"Los hechos habían ocurrido en Valladolid. Horas después de ser detenido se archivó la causa porque lo que demostraron los testigos es que había tratado de salvar a su mujer cuando intentaba tirarse por la ventana. Usted señaló públicamente a un hombre inocente. Es más, todavía resuena en esta cámara su indignidad por cesar a Pérez de los Cobos por negarse a cometer un delito", ha concluido la diputada de Vox.