Unidas Podemos ha obtenido 10 escaños y un 7,3% de los votos (escrutinio no finalizado) en las elecciones madrileñas. La formación morada aumenta su representación en 3 diputados, insuficientes para la formación de un gobierno tripartito de izquierdas junto a PSOE y Más Madrid y muy lejos del vuelco electoral a la andaluza que auguraba Pablo Iglesias hace una semana.
La figura política de Iglesias "está gastada". Lo dijo hace unos días él mismo en una entrevista en el Corriere della Sera y este martes lo han confirmado los votantes. De hecho, la entrada del líder morado en la campaña madrileña sí ha supuesto un revulsivo, pero no para Podemos. La que verdaderamente ha rentabilizado el efecto Iglesias ha sido Isabel Díaz Ayuso, gracias al voto de rechazo a la figura del exvicepresidente segundo del Gobierno.
El proyecto político encabezado por Iglesias ni siquiera ha seducido la mayoría de votantes de izquierda. Más Madrid, el partido creado por su excompañero Íñigo Errejón, ha obtenido más del doble de apoyos, lo que supone una estocada especialmente dañina para Iglesias y la consumación de la venganza de Errejón tras su purga de Podemos.
A la espera de conocer si Iglesias dejará tirados a sus votantes a partir de mañana, todo apunta a que esta ha sido la última cita electoral a la que concurre como cabeza de lista. Sus planes incluyen ceder el liderazgo de Podemos a la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y dedicarse al nuevo proyecto audiovisual que estaría negociando con Roures, según ha publicado ABC.