Los responsables de la delegación de la Generalidad en Madrid han decidido celebrar la festividad de San Jorge, el día del libro y la rosa en Cataluña, colgando la bandera de España boca abajo junto a una bandera regional catalana.
La Generalidad tiene su sede en la calle de Alcalá número 44 y además de las oficinas funcionariales también cuenta con la librería Blanquerna, dedicada a la venta de volúmenes editados por la administración autonómica y obras en catalán, así como a la celebración de canapés supuestamente culturales. En la actualidad, el delegado de la Generalidad en Madrid es Gorka Knörr, quien tras una larga trayectoria vinculada al nacionalismo vasco ha encontrado acomodo en el golpismo catalanista.
Si hace dos años, la 'gracieta' de la Generalidad fue bridar la bandera nacional mientras la señera ondeaba libremente, este año se ha incurrido directamente en el ultraje a la bandera, delito que no puede ser considerado libertad de expresión según la última resolución al respecto del Tribunal Constitucional. Los nacionalistas catalanes y Podemos quieren despenalizar esta clase de delitos con la connivencia del PSOE, de modo que actos como las ofensas contra los símbolos constitucionales queden fuera del Código Penal.