Nueva 'idea' del Consell per la República, cuyos promotores, en síntesis los prófugos Puigdemont y Toni Comín (exconsejero de Salud del Govern golpista), están en una fase de máxima actividad después de tres años de absoluto letargo. La última ocurrencia es crear una red "diplomática" formada por supuestos cónsules honorarios cuya misión sería representar de manera oficial a una fantasmagórica república catalana.
Tras el carnet de identidad catalán, calificado como el timo de la estampita separatista, el Consell lanza una red consular cuya principal cualidad, según ha explicado Comín, será que los afortunados correrán con todos los gastos. Máxima rentabilidad, por tanto, con el mínimo gasto de "investir" a determinadas personas como representantes del Palmar de Troya de Puigdemont, según definió al Consell el periodista de El Mundo Iñaki Ellakuría.
Además de atraerse a personajes con posibles que aspiren a un título "diplomático", aunque sea de un Estado que no existe, el propósito de la nueva iniciativa es demostrar que el Consell per la República puede contribuir a la internalización del proceso separatista, que según Comín necesita de más instrumentos que los que tiene hoy el independentismo. Así es que además de las delegaciones en el extranjero de la Generalidad dedicadas en exclusiva a la propaganda antiespañola y el Diplocat (consorcio de la administración autonómica que se utiliza para lo mismo), se contará también con un grupo de individuos repartidos estratégicamente como representantes "oficiales" del chiringuito de Waterloo.
La iniciativa se debe encuadrar en los intentos de Puigdemont y su corte en Bélgica por dotar de notoriedad al Consell per la República, ente con el que el prófugo aspira a controlar el próximo gobierno separatista si finalmente ERC y Junts per Catalunya (JxCat) alcanzan un acuerdo. Desde su constitución, el Consell per la República no ha tenido ninguna actividad. Puigdemont y Comín tratan de dotarlo de sentido en los últimos días para lograr que ERC y la CUP transijan y acepten que el organismo sea el nuevo "estado mayor" del proceso independentismo.
Para ello, además del DNI separatista y esta red "consular", han aceptado cambiar la estructura de mando del ente, que contaría a partir de ahora con representantes de todos los partidos independentistas, así como de las organizaciones Òmnium y Asamblea Nacional Catalana (ANC).