El Gobierno ha conseguido sacar adelante su Ley de eutanasia después de hasta tres intentos para recibir el visto bueno del Congreso que, este jueves, ha dado luz verde definitivamente a la norma con 202 votos a favor de PSOE, Podemos, BNG, ERC, JxCat, Maís País, Bildu, PNV, CUP y Ciudadanos, y 141 en contra de PP, Vox, UPN y Foro Asturias.
PSOE y Podemos han intentado sacar adelante la norma desde su llegada a Moncloa. Su tramitación parlamentaria ha durado apenas siete meses y se ha producido en pleno estado de alarma por la pandemia del coronavirus. El Congreso debatía este miércoles la Ley con las enmiendas introducidas por el Senado.
Con su aprobación, España pasa a ser uno de los pocos países en los que la eutanasia es legal, junto a Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Canadá, Colombia y Nueva Zelanda. Podrán solicitarla los mayores de edad que sufran una enfermedad grave o incurable que cause "un sufrimiento físico o psíquico intolerable" sin posibilidad de curación o mejoría.
El paciente debe confirmar su voluntad de morir al menos en cuatro ocasiones a lo largo del proceso que durará un mes y en cualquier momento podrá echarse para atrás. El sistema nacional de salud contempla la objeción de conciencia de los médicos.
PP y Vox acuden al TC
PP y Vox han anunciado diferentes recursos al Tribunal Constitucional para intentar parar su entrada en vigor dentro de tres meses. Los de Abascal incluso han reclamado su suspensión cautelar hasta que se resuelva el recurso. El portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha prometido a las puertas del Congreso que derogarán la norma "en cuanto gobiernen" y la sustituirán por una de cuidados paliativos.
"La dignidad de nuestros mayores, la dignidad de los enfermos está por encima de la política, sobre todo de la política de los progres", ha declarado rodeado de varias asociaciones que protestaban por la aprobación de la norma.
Los manifestantes portaban carteles en los que se podía leer "No existe el derecho a matar. Stop eutanasia". Ayer, Jaime Mayor Oreja acudió también a las puertas del Parlamento para protestar contra la Ley, donde estuvo acompañado por Espinosa de los Monteros y el diputado del PP, José Ignacio Echániz.