Marlaska acerca al País Vasco a 5 terroristas de ETA, incluidos dos autores de la masacre de Vallecas

El Gobierno sigue acercando a los terroristas de ETA que cumplen condena a cárceles del País Vasco o Navarra o, por lo menos, más próximas a estas comunidades autónomas que aquellas en las que venían cumpliendo su pena. Así lo ha vuelto a confirmar este jueves la Dirección General de Víctimas del Terrorismo –dependiente del Ministerio del Interior de Fernando Grande Marlaska– a las principales asociaciones de víctimas.

Dignidad y Justicia ha censurado estos acercamientos y considera que los mismos son "el pago a los herederos de la organización terrorista ETA para mantener su sillón en Moncloa" –en alusión al que ocupa Pedro Sánchez– y ha advertido que "tales decisiones no van a salir gratis a nadie, pues se van a utilizar todos los medios que la ley permite para revocar decisiones políticas y hacer prevalecer el honor y la dignidad de las víctimas del terrorismo".

"En el lote de los cinco etarras premiados hoy por este Ministro traidor, se encuentra Juan Antonio Olarra Guridi, condenado a 30 años por el asesinato, entre otros, del padre de nuestro presidente, el Fiscal Jefe del TSJA, Luís Portero García. Una progresión a segundo grado y acercamiento llevado a cabo en contra del criterio de la Junta de Tratamiento de la prisión, lo que pone de manifiesto que estos beneficios penitenciarios no obedecen a criterios técnicos, sino exclusivamente políticos", ha añadido la asociación.

La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) ha mostrado su rechazo a estos acercamientos y su "preocupación" por los "importantes núcleos de etarras que estos acercamientos masivos están provocando en algunas cárceles del norte. Cerca del 87% de los presos etarras ya están en cárceles más al norte de Madrid. En prisiones como la de Logroño, ya se encuentran 20 etarras y la de Zuera (Zaragoza), ya cuenta con 12 etarras".

"El Gobierno sigue vaciando las cárceles del sur del país, en las que ya sólo quedan 26 etarras", han dicho desde la asociación, que recuerda que "la transferencia de Prisiones al País Vasco está en su recta final, y desde la AVT estamos muy preocupados por las consecuencias que pueda tener en nuestro colectivo", ya que el Gobierno vasco apuesta por "el cumplimiento de las penas en semilibertad".

Los cinco terroristas de ETA cuyo acercamiento se ha confirmado este jueves son Ainhoa Múgica Goñi, Juan Antonio Olarra Guridi, Miguel Santiago Izpura García, Ignacio Crispín Garcés Beitia e Ignacio Crispín Garcés Beitia, que participaron en el asesinato de 13 personas. Los dos primeros participaron en la masacre de Puente de Vallecas (Madrid) de octubre de 1995.

Ainhoa Múgica Goñi. Va de la prisión de Granada a la cárcel de Logroño. En 2009 la Audiencia Nacional le condenó a 75 años de prisión por su participación en el atentado que acabó con la vida de Santos Santamaría Avendaño. El 29 octubre de 2007 fue condenada a 1243 años de prisión como autora del atentado que acabó con la vida de Manuel Carrasco Almansa, Santiago Esteban Junquer, José Ramón Intriago Esteban, Florentino López del Castillo, Félix Ramos Bailón y Martín Rosa Varela, el 11 de diciembre de 1995 en Madrid. Además fue condenada en 2008 a 20 años por el atentado en 2001 contra el subsecretario general de Policía Científica, Juan Junquera, en el que éste y otras 96 personas resultaron lesionadas. También fue condenada a 18 años de prisión por un delito de estragos terroristas por haber ordenado a los miembros del "grupo Xoxua" de ETA perpetrar el atentado contra la Torre de Logroño cometido el 10 de junio de 2001.

Juan Antonio Olarra Guridi. Va de la prisión de Granada a la de Logroño. En 2007 fue condenado a 28 años de prisión como responsable del atentado que acabó con la vida de José Antonio Santamaría Vaqueriza. En 2007 la Audiencia Nacional le condenó a 28 años de prisión como autor del asesinato de José Ramón Domínguez Burillo. El 29 octubre de 2007 fue condenada a 1243 años de prisión como autora del atentado que acabó con la vida de Manuel Carrasco Almansa, Santiago Esteban Junquer, José Ramón Intriago Esteban, Florentino López del Castillo, Félix Ramos Bailón y Martín Rosa Varela. También fue condenado a 30 años como inductor del asesinato de Luis Portero García. En abril de 2010 fue condenado a 30 años como inductor del asesinato de Antonio Emilio Muñoz Cariñanos. Además fue condenado a 1000 años de prisión por ordenar el atentado perpetrado el 6 de noviembre de 2001 contra el subsecretario de Política Científica Juan Junquera, en el que hubo 95 heridos aunque éste resultó ileso. También fue condenado a 15 años de prisión por la inducción de un atentado en el año 2000 que supuso que un trabajador de Sevilla, al que los etarras confundieron con un militar, llevara una bomba en su coche durante varios días.

Miguel Santiago Izpura García. Va de la prisión de Murcia a la de Zuera (Zaragoza). En 2001 fue condenado por la Audiencia Nacional a 27 años por su participación en el atentado que le costó la vida a Luis Ollo Ochoa en mayo de 1984.

Arkaitz Goikoetxea Basabe. Va de la prisión de Villena (Alicante) a la de Logroño.En 2010 fue condenado a 515 años de prisión por preparar y ejecutar el atentado contra el cuartel de la Guardia Civil en Legutiano, en Álava, el 14 de mayo de 2008, en el que fue asesinado Juan Manuel Piñuel Villalón. Además, fue condenado a 22 de prisión por un atentado con cócteles molotov perpetrado contra una patrulla de la Ertzaintza en Portugalete el 5 de agosto de 2001. A 72 años por el atentado con coche bomba cometido el 24 de agosto de 2007 contra la casa cuartel de Durango. Y a 133 años de prisión por el atentado contra la casa cuartel de Calahorra cometido el 21 de marzo de 2007. Su última condena fue en 2020, de 20 años de prisión por la colocación de una furgoneta bomba cerca del Club Marítimo del Abra en Guecho el 19 de mayo de 2008.

Ignacio Crispín Garcés Beitia. Va de la prisión de Zuera (Zaragoza) a la de Bilbao. En el 2001, la Audiencia Nacional le condenó a 17 años y 6 meses de cárcel por los delitos de pertenencia a banda armada, depósito de armas de guerra, municiones y explosivos, tenencia ilícita de armas y falsificación de documento oficial, por reconstituir en 1996 el grupo Araba de ETA. Además, fue condenado en 1999 a 73 años de cárcel por la colocación de dos explosivos en una residencia militar de Araca (Vitoria), dos años antes.