Los cazas de combate españoles desplegados en Rumania ya han entrado en acción. La OTAN ha confirmado este viernes que los aparatos españoles tuvieron que salir en una misión para interceptar a dos cazas Sukhoi Su-30 de la Fuerza Aeroespacial de Rusia, que se aproximaban por el Mar Negro hacia espacio aéreo rumano. Los aviones rusos volaban incumpliendo las leyes internacionales.
Alrededor del mediodía de ayer jueves, los radares de Centro de Operaciones Aéreas Combinadas (CAOC) de la OTAN para el sur de Europa, situado en Torrejón de Ardoz (Madrid), detectaron una señal no identificada en espacio aéreo internacional sobre el sur del Mar Negro que se dirigía hacia el espacio aéreo rumano, por lo que se movilizó de inmediato a los cazas de combate españoles ubicados la base aérea rumana Mihail Koglaniceanu.
"Durante la misión de alerta, nuestros Eurofighters identificaron dos aviones militares rusos Su-30 que volaban sin señal de transpondedor y sin plan de vuelo, además de sin estar en contacto con el Control de Tráfico Aéreo Civil. Mis pilotos siguieron a los aviones rusos demostrando la capacidad de la OTAN para responder de inmediato a estas situaciones", explica el teniente coronel José Enrique Hernández Medel en un comunicado distribuido por la OTAN.
Los dos cazas rusos giraron en el último momento en dirección norte para no llegar a penetrar dentro del espacio aéreo rumano. Una vez confirmado este movimiento, los cazas españoles dejaron de seguir a los aviones rusos y procedieron a volver a la base rumana donde están desplegados desde hace unas semanas.
La misión española en este país comenzó el pasado 1 de febrero y concluirá a finales de este mes de marzo. Está formada por seis cazas Eurofighter Typhoon, que forman parte del Ala 11, con base en Morón de la Frontera (Sevilla), y por un total de 150 militares, entre pilotos, mecánicos, armeros y otro personal militar esencial para este tipo de despliegues.
El objetivo de esta misión es doble. Por un lado, reforzar las capacidades de control del espacio aéreo de este país, que se encuentran bastante mermadas, ya que están en pleno proceso de modernización de su fuera aérea cambiando viejos y obsoletos cazas MIG 21 de fabricación soviética –más de la mitad ni siquiera están operativos– por cazas F16 bastante más modernos. Por el otro, controlando las posibles amenazas de la Fuerza Aeroespacial de Rusia.