El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha asegurado este lunes que el Gobierno va a garantizar el suministro de alimentos, agua y electricidad para todos los ciudadanos "pese a la gravedad de la situación" que está provocando el paso del temporal Filomena por casi todo el territorio nacional. De hecho, no está fechado un problema meteorológico similar desde principios de la década de los setenta del siglo XX.
Durante su intervención en una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, en la que han participado también los ministros de Defensa y Transportes, ha pedido a la población que se mantenga en sus casas. "Es necesario aplazar cualquier desplazamiento que sea evitable, por seguridad y para no interrumpir el trabajo de los operarios de la red viaria. Vivimos las condiciones meteorológicas más adversas de los últimos tiempos", ha dicho.
Marlaska ha explicado que para el sistema nacional de Protección Civil la prioridad ha sido garantizar el funcionamiento de los servicios públicos fundamentales y de las infraestructuras críticas, para que los ciudadanos se viesen afectado de la menor manera posible, al tiempo que ha avanzado que algunas de las regiones que se han visto afectadas por el temporal Filomena ya han empezado su "desescalada meteorológica".
También ha explicado que los aviones con las 350.000 dosis de la vacunas de Pfizer contra el coronavirus que debían llegar esta madrugada lo hicieron según el horario previsto "en la media docena de aeropuertos que tenemos destinados para ello" y que estas dosis ya han sido distribuidas una vez fueron recepcionados en los respectivos centros de almacenaje.
Declaración de zona catastrófica
No ha querido contestar directamente a si la capital de España va a ser declarada como zona catastrófica, tal y como ha pedido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, pero sí ha dicho que en el Gobierno "estamos tomando los datos para las ayudas que sean precisas cuando llegue el momento" pero "cuando concluya la situación de emergencia y concluya la evaluación definitiva".
Tampoco ha sido claro el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, que no ha descartado esa posibilidad de que Madrid sea considerada zona catastrófica pero tampoco ha dado ningún elemento para considerar cuál va a ser la respuesta del Ejecutivo una vez la capital de España realice su solicitud.
Buena coordinación entre administraciones
Ábalos ha considerado como "buena" la coordinación que está habiendo entre las distintas administraciones durante el temporal Filomena y ha defendido la gestión que ha hecho el gobierno del temporal, bajo una única prioridad "la seguridad de las personas". De igual modo, ha añadido que de cara al futuro "debemos de dotarnos de más recursos para responder a este tipo de situaciones".
Por su parte, Margarita Robles ha explicado que en estos momentos hay unos 1.500 militares desplegados por todo el país trabajando para que las zonas más afectadas puedan recuperar la normalidad lo más rápido posible. De ellos, unos mil están en Madrid (600 de la UME y 400 del Ejército de Tierra), unos 200 en Aragón y los otros 300 están distribuidos por el resto del territorio, con especial presencia en Castilla-La Mancha.
La ministra de Defensa ha insistido en que "nadie debería tener la tentación de hacer una utilización política de esta situación" y ha insistido en que "la Unidad Militar de Emergencias y el Ejército se van a seguir volcando para recuperar esa normalidad".