La ANC, en quiebra: los dimitidos crean una plataforma alternativa

La Assemblea Nacional Catalana (ANC) atraviesa una grave crisis. Los dirigentes críticos que abandonaron la organización acaban de presentar una plataforma alternativa llamada Donec Perficiam (Hasta conseguirlo) con la que pretenden suplantar y superar a la ANC así como forzar una candidatura electoral única del separatismo que proclame la independencia tras las próximas elecciones.

A primeros de noviembre, hasta siete secretarios "nacionales" de la ANC se dieron de baja de la organización en protesta por el sesgo "posibilista" de la entidad. Los críticos planteaban que la ANC exigiera a los partidos la adopción de la unilateralidad como santo y seña para los próximos comicios autonómicos. Es decir, que se vuelva a proclamar la república en base a los resultados del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, un acto en el que según datos de los propios separatistas no se llegó ni a un treinta por ciento de participación.

Tras el portazo han creado una plataforma cuyo objetivo es lograr la unidad del separatismo, fracturado ahora en una quincena de posibles candidaturas. Consideran que una única candidatura sería la manera más directa para poder proclamar la independencia y pretenden "crear un ambiente previo de plebiscito unilateral que convierta las elecciones en una acto de autodeterminación con una fuerza similar al 1-O", según se puede leer en el primer comunicado de la plataforma que se define como "unilateralista" y "octubrista".

La nueva entidad aspira a una candidatura única pero se compromete a apoyar a los partidos que asuman explícitamente la unilateralidad y "que hagan efectiva la declaración del 27 de octubre, reactiven la declaración unilateral de independencia, la publiquen en el Diario Oficial de la Generalidad y realicen una declaración política en sede parlamentaria".

Más allá de las pretensiones políticas de Donec Perficiam, la irrupción de este grupo en el independentismo alude a la quiebra de la ANC, que ha sido desactivada por los propios partidos separatistas mayoritarios y ha perdido casi todo su protagonismo.