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Jaume Roures, con una deuda de 713 millones, recibe una ayuda del ICO de 55 millones

Mediapro se niega a pagar los derechos de la liga francesa y exige renegociar el contrato que suscribió antes de la pandemia.

Jaume Roures. | EFE

Mediapro afronta graves dificultades financieras hasta el punto de que es incapaz de hacer frente a los pagos comprometidos con la liga francesa por los derechos de retransmisión de los partidos de fútbol. La empresa de Jaume Roures no pagó los 172 millones del primer plazo prometido a los clubes y ha asegurado que no pagará los 150 millones cuyo abono estaba fijado para principios de diciembre.

La compañía de Roures y Tatxo Benet adquirió los derechos de la liga francesa para el periodo 2020-2024 por unos 780 millones de euros, pero ahora pretende renegociar el contrato con la excusa del coronavirus. La morosidad de Mediapro ha sumido a los clubes franceses en una grave crisis, ya que muchos ya habían gastado gran parte del dinero que en teoría iban a recibir de la sociedad dirigida por los citados Roures y Benet.

La operación francesa ha sido un completo fracaso. Téléfoot, el canal de pago creado por Mediapro, sólo ha conseguido 600.000 abonados cuando la previsión para hacer rentable el negocio era de tres millones. El público francés considera muy caro el precio de 26 euros mensuales y hay una creciente opinión contraria a la empresa por sus impagos.

Mediapro tiene una deuda de más 713 millones de euros y recibió un crédito del ICO con aval del Estado de 55 millones de euros condicionado a que los socios de la empresa aportaran igual cantidad, según apunta una información de El Periódico en la que se abunda en que la agencia de calificación de riesgos Moddy's ha rebajado de B1 a Caa1 (tres escalones) la nota de Joye Media, matriz del grupo. Esta nueva calificación es el equivalente a "baja solvencia".

La nota de Moodys, el crédito del ICO y el rechazo de la liga italiana a la oferta de Mediapro por no poder presentar avales han destrozado las previsiones de los accionistas de salir a Bolsa. La compañía tiene como principal accionista al fondo chino Orient Hontai, con un 53%. La empresa británica de servicios de marketing y comunicaciones WPP es el segundo accionista con el 22,5% y Roures y Benet disponen de un 12% cada uno.

El asalto al Barça

Diversos medios apuntan a que Roures estaría detrás de la candidatura de Víctor Font a la presidencia del FC Barcelona, club que el empresario catalán vería como una tabla de salvación ante sus cada vez más declinantes negocios. Según El Periódico, las dos partes niegan que Roures tenga nada que ver con Font, candidato declaradamente independentista. No obstante, el citado medio subraya la vinculación de Roures con la Generalidad, que precipitó la caída de Bartomeu al impulsar la moción de censura, y pone como ejemplo que el empresario puso a disposición del Govern de Puigdemont sus instalaciones como centro de prensa del referéndum ilegal del 1-O.

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