El pasado 1 de octubre, el Gobierno publicó en el BOE los tres parámetros que permitirían imponer confinamientos perimetrales en las distintas comunidades autónomas: una tasa de incidencia de 500 contagios por cada 100.000 habitantes, un porcentaje de pruebas positivas de PCR superior al 10% y una ocupación de las UCI por pacientes de coronavirus del 35%.
A pesar de que Madrid ha conseguido reducir la incidencia acumulada por debajo de 500, el Ministro de Sanidad se niega a levantar el estado de alarma al considerar que la cifra todavía "tiene que bajar muchísimo más" y debería estar "por debajo de los 200 como mínimo". Un nuevo umbral que en estos momentos superan también otras 11 regiones.
En los últimos días, todas las miradas han estado puestas en Navarra, la Comunidad que lidera este ranking con 774 casos por cada 100.000 habitantes. Aun así, según los últimos datos disponibles, el porcentaje de camas UCI ocupadas por pacientes con coronavirus en esta región apenas roza el 25%, 10 puntos menos del nivel establecido por el Gobierno para decretar el estado de alarma en Madrid, y eso es precisamente lo que la aleja de este escenario.
La Rioja, sin embargo, está más cerca de cumplir todos los requisitos para ser confinada. Presidida por la socialista Concha Andreu, esta región cuenta con una incidencia acumulada al alza que ya supera los 420 casos por cada 100.000 habitantes, un 12,8% de las PCR positivas y una ocupación de camas UCI por pacientes covid que oscila entre el 30 y el 36% en función del día. Por si fuera poco, a estos tres datos preocupantes, el sindicato independiente CSIF añade uno más: la falta de personal.
Los médicos no quieren trabajar en La Rioja
En declaraciones a Libertad Digital, su portavoz regional en el ámbito sanitario, Ángel Las Peñas, denuncia que, a pesar de que el Gobierno autonómico ha ampliado el número de camas UCI, la plantilla no se ha incrementado en la misma medida. "De nada sirve tener 300.000 camas si no tienes gente que las atienda —se queja este médico de familia—. Ese es el problema de La Rioja".
A la falta de contratación, se suma el cada vez menor interés de los profesionales por esta comunidad: "Se nos van al extranjero, que eso es un problema común de toda España, pero también a Navarra y al País Vasco, porque están aquí al lado y ofrecen mejores condiciones no sólo económicas, sino también a nivel de estabilidad". A su juicio, la solución es sencilla, pero el gobierno de la socialista Concha Andreu no parece estar haciendo los deberes. No en vano, desde hace meses, los trabajadores de Urgencias del Hospital San Pedro se manifiestan todas las semanas para reclamar más personal ante la saturación del servicio y el consecuente agotamiento de la plantilla. La última concentración tuvo lugar este mismo martes, cuando los médicos acusaron a su presidenta de mentir para tratar de desacreditarles, tras asegurar que se movían por cuestiones meramente políticas.
Una botella de vino como incentivo
Según el responsable de Salud de CSIF La Rioja, sin embargo, los médicos de esta comunidad están "en una situación desesperada", porque al cansancio acumulado se suma la falta de reconocimiento de la administración: "En algunas comunidades se ha premiado el esfuerzo con una paga extra, aquí se nos ha dado una botella de vino. Eso es un insulto".