El presidente de la Generalidad, Quim Torra, ha comparecido a primera hora de este lunes para afirmar que la situación en Cataluña a causa del coronavirus es "crítica". "El incremento de contagios es muy preocupante y estamos en una situación parecida a la de marzo" ha declarado Torra para alertar acto seguido de que, si en los próximos diez días no se revierten los datos, habrá que adoptar medidas más severas y restrictivas.
"No me doblegará ningún lobby a la hora de tomar las medidas necesarias" ha avisado Torra. "Debemos evitar llegar a situaciones que pongan en riesgo nuestra economía y nuestro futuro" añadió el dirigente separatista, que ha centrado toda la responsabilidad en los ciudadanos: "Es necesario bajar el ritmo y las concentraciones de personas. No nos podemos relajar con la mascarilla, el lavado de manos y la distancia física". También ha pedido que se limite la movilidad, que no se viaje a las segundas residencias y ha alertado a los jóvenes y pedido que se acabe con los botellones.
"Cuando hablamos de situación crítica, ¿a qué nos referimos? A que está teniendo mucho impacto en la atención primaria a pesar de que los casos no son tan graves como en marzo" ha abundado Torra. "Levanto la bandera roja de alerta. Lo vivido en marzo nos debe poner sobre aviso. Tenemos que evitar que la tensión se traslade a los centros hospitalarios" ha dicho también.
"Esfuerzo colectivo"
"Es la hora de un esfuerzo colectivo, depende de todos que se detengan los contagios y no tengamos que pasar a una situación más restrictiva" declaró el presidente autonómico. También ha intentado lanzar un mensaje de tranquilidad al turismo y ha asegurado que "Cataluña es un destino turístico responsable y seguro". Así, ha pedido que los turistas no descarten viajar a la región mientras que reclama a los ciudadanos que limiten sus movimientos.
Torra también ha aportado varios datos para ilustrar sus llamamientos. La semana pasada hubo 5.400 positivos, mientras que en la anterior se dieron 3.845. También ha informado de que en los últimos días se han pasado de 56 personas en las unidades de cuidados intensivos a las 75 y de que la edad media de los contagiados es de 37 años frente a los 60 en la primera fase de la pandemia, los pasados meses de marzo y abril.
El presidente catalán se ha hecho acompañar por el director general de Salud Pública, Josep Maria Argimon, para el turno del preguntas. El presidente autonómico ha marginado por completo a la consejera de Salud, Alba Vergès, de ERC, que hasta ahora era la cara visible de la Generalidad en la comunicación sobre la epidemia.
Expediente al Arzobispado
El presidente regional también ha anunciado que se abrirá un expediente sancionador por parte de la consejería de Salud contra el Arzobispado de Barcelona por el funeral celebrado este domingo en la Sagrada Familia. Torra ha aprovechado la rueda de prensa para criticar al arzobispo Omella, a quien ha reprochado que reivindique la libertad de culto pero "no se ha pronunciado "nunca a favor de los derechos fundamentales ni ha condenado la violencia del 1-O".
El presidente regional, que siempre ha presumido de su condición de católico practicante, ha proseguido con la arremetida al afirmar que se educó en los Jesuitas y en la teología de la liberación y que su Iglesia "es la de los curas de la Mina y Bellvitge, la Iglesia de los pobres".