Nuevo acto de desobediencia judicial del presidente de la Generalidad, Quim Torra, quien ha anunciado este lunes por la mañana que no acepta la resolución judicial que impide confinar la comarca del Segriá sin aportar más datos epidemiológicos.
Torra ha llevado la resolución judicial al terreno político y ha asegurado que la decisión de endurecer las medidas "cuenta con el respaldo de los expertos". "No estamos de acuerdo con esta decisión judicial, no la aceptamos. Asumo las consecuencias que se deriven. Estamos hablando de la salud de la gente", ha añadido Torra.
El dirigente separatista ha apelado a la complicidad de la ciudadanía y ha pedido a los habitantes de Lérida y del resto de localidades afectadas (Alcarrás, Soses, Serós, Aitona, La Granja de Escarp, Masalcoreig y Torres de Segre) "que se protejan ante el avance del coronavirus, que sigan las indicaciones que dimos ayer".
Victimismo
Además, ha anunciado que el gobierno regional se va a reunir de urgencia para elaborar un decreto ley que refuerce la decisión de la reclusión domiciliaria y facilite la adopción de tal medida en otras zonas de Cataluña. También se ha quejado de que "en otras partes se ha impedido el derecho a voto y no ha habido ningún impedimento". "Condenamos que se nos impida adoptar a nosotros las medidas extraordinarias que hacen falta. Lo que nos marca el camino son las indicaciones de los expertos. El gobierno de Cataluña está al lado de la gente del Segriá y del Hospitalet, todas las decisiones van encaminadas a proteger su salud. Estas decisiones las tomamos a favor de los ciudadanos", ha insistido Torra.
El presidente regional no ha querido entrar en los argumentos de la juez sobre la falta de datos y concreciones de la Generalidad, así como de competencias, y se ha remitido a un decreto que estará listo, según ha dicho, esta misma tarde.
En todo momento se ha escudado en los dictámenes de los expertos y en la salud de la ciudadanía para justificar las actuaciones de la Generalidad. Sin embargo, los alcaldes de la zona se han quejado de la improvisación y el caos con el que las autoridades autonómicas están gestionando los rebrotes. También desde diversos sectores económicos se ha censurado la actuación del gobierno catalán. La falta de personal y medios para llevar a cabo un seguimiento preciso de los contagios es una de las críticas de fondo que se vierten contra la Generalidad y que fuerza la media de la reclusión domiciliaria.
En la rueda de prensa también ha participado el vicepresidente Pere Aragonès, de ERC, que se ha limitado a repetir las palabras de Torra. El clima preelectoral en Cataluña ha llevado a ERC a exigir la presencia de Aragonès en la comparecencia ante los medios.