El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recriminado este sábado al PP que su "autoexclusión" de los acuerdos para la reconstrucción y le ha advertido de que "un partido que se autoexcluye de los acuerdos de Estado deja de ser un partido de Estado en Galicia y en España".
El devenir económico ha marcado buena parte del discurso de Sánchez en su intervención en La Coruña junto al candidato socialista a la presidencia de la Junta en las elecciones del próximo 12 de julio, Gonzalo Caballero. Sánchez ha vaticinado tiempos turbulentos en lo económico y en lo social, y que —ante esta tesitura— ha invitado a escoger entre "el sálvese quien pueda del PP o el que nadie se quede atrás del Partido Socialista", los dos modelos que —a su juicio— se miden las caras en estas elecciones autonómicas.
Asimismo, ha destacado su lealtad con el resto de autoridades de un "Estado compuesto" como es España, ya que no ha habido desde el Ejecutivo —ha asegurado— "ninguna crítica a los gobiernos autonómicos del PP", a diferencia de la "beligerancia y deslealtad" de la derecha.
Con respecto a la pandemia, Sánchez también ha advertido de que "no tenemos que bajar la guardia", ha advertido, aunque también ha querido defender que "el Estado hoy está mucho mejor pertrechado para luchar contra la Covid-19" que hace unos meses y que, por lo tanto, no puede triunfar "el miedo", sino que toca "disfrutar de la nueva normalidad y recuperar la economía".
Casado ensalza a Feijóo frente a un Gobierno que "insulta"
El líder del PP, Pablo Casado, ha vuelto a tierras gallegas por cuarto día en campaña electoral y ha puesto en valor el proyecto "moderado y sensato" del presidente de la Junta y candidato a la reelección de su partido, Alberto Núñez Feijóo, frente a un Gobierno central que "crispa" e "insulta".
Tras su intervención en Pontevedra, Casado se ha desplazado hasta As Pontes (La Coruña) donde defendió la viabilidad tanto de Alcoa como de la central térmica de As Pontes y defendió el proyecto de Núñez Feijóo por ser "marca PP", al igual que el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, el invitado estrella a este acto antes de conocerse la presencia de Casado.
Y es que Feijóo ha insistido en comprometerse con el futuro de esta planta y de la multinacional Alcoa en San Cibrao (Lugo), frente a lo que considera "mentiras" del Gobierno central, y ha rechazado la clausura de la térmica de Endesa en As Pontes (La Coruña) por "mala, injusta y demagógica".
Pero más allá de la defensa de estos proyectos industriales, el discurso de los tres se ha dirigido a reclamar a los votantes que acudan a las urnas el próximo 12 de julio y ha descartar cualquier "miedo" que pueda por posibles contagios de coronavirus, aunque sin referirse en ningún momento al rebrote registrado en La Mariña.
De hecho, el líder del PP gallego pidió, por la mañana en Pontevedra, a todos los gallegos que quieran una sanidad de calidad que voten a Feijóo, que durante la pandemia del coronavirus ha sido "muy precavido y garantista", por lo que ahora el sistema sanitario "está preparado para cualquier contingencia".
Abascal pide acabar con "la ley del silencio"
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha reivindicado a esta formación como el partido del "sentido común" que quiere "romper la ley del silencio" en el Parlamento gallego, para lo que ha pedido lograr en esta autonomía los resultados de Andalucía o a nivel estatal.
"Galicia tiene la oportunidad que no dejaron pasar los andaluces ni el conjunto de los españoles, como la tienen los vascos", ha dicho en un mitin celebrado en el exterior del Palacio de Congresos y Exposiciones de La Coruña (Palexco) con la asistencia de unas 300 personas.
En él, ha anunciado también la creación de un sindicato "que proteja a los trabajadores y que esté al servicio de los españoles y no de los partidos". "Ni al servicio de la izquierda ni de intereses globalistas", ha apostillado.
En su intervención, como hizo también en su mitin en Lugo, ha arremetido contra las personas —casi dos centenares— que fuera de la zona del mitin se han concentrado para expresar su rechazo a los "fascistas". "Aquí los patriotas —ha expuesto sobre los asistentes a su mitin— y detrás la chusma totalitaria, los hijos de Pablo Iglesias y de Beiras", ha añadido sobre los concentrados.
"Deberían ser expulsados a pelotazos, detenidos e identificados", ha expuesto también criticando que por parte del delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, no se haya ordenado "cargas" contra lo que ha definido como "una manada de totalitarios delincuentes".
Arrimadas pide "un pequeño apoyo"
La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha demandado "un pequeño apoyo" para su partido, que es lo que cree que necesita la formación naranja para tener representación en el Parlamento de Galicia, lo que supondría, ha dicho, "un gran cambio" para la comunidad autónoma.
En su primer acto público tras su maternidad, en el que ha arropado, junto al grueso de la ejecutiva de Cs, a Beatriz Pino, la candidata a la Junta, Arrimadas ha pedido a los gallegos que "no se conformen con lo que hay" ni se dejen llevar por quienes pregonan que "todo va bien" y que "no hay nada que cambiar", cuando hay "mucho que mejorar". Ha prevenido también de los "inventos", del "caos" y de los "delirios de nacionalistas y populistas".
Arrimadas ha declarado sentirse "muy orgullosa por la política útil" desarrollada por su partido durante la pandemia del coronavirus y por haber dejado "en buenas manos" la representación del partido en el Congreso en su portavoz adjunto, Edmundo Bal.