Hace exactamente una semana, el 8 de mayo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, anunció que los madrileños podrían recoger gratis una mascarilla FFP2 a partir del lunes, 11 de mayo, en las farmacias. En total, la Comunidad de Madrid adquirió 14 millones de estas mascarillas para repartirlas entre los ciudadanos de cara a la desescalada.
Horas después del anuncio de la presidenta madrileña, el ministro de Sanidad, Salvador Illa y el director del Centro de Alertas y Emergencias, Fernando Simón, ofrecieron una rueda de prensa para desvelar en qué fase de la desecalada quedaba cada provincia. En esa rueda prensa, un periodista le preguntó a Fernando Simón qué le parecía la medida de la Comunidad de Madrid de repartir mascarillas FFP2. En su respuesta, el doctor Simón afirmó que "el uso de las mascarillas FFP2 está indicado para personas sanas, las personas que tienen sintomatología debería utilizar las quirúrgicas. Por lo tanto, yo creo que es una buena medida".
A los seis días de esta respuesta de Fernando Simón, concretamente el 14 de mayo, el Ministerio de Consumo de Alberto Garzón emitió una nota diciendo que no recomendaban a la población general el uso de las mascarillas FFP2, repartidas por la Comunidad de Madrid. A todas luces, este anuncio suponía una contradicción con lo dicho el 8 de mayo por Simón. Desde Es la tarde de Dieter decidimos ponernos en contacto, vía correo electrónico, con el Ministerio de Consumo para aclarar si el anuncio hecho por el ministerio de Alberto Garzón era una desautorización al director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.
Desde la cartera de Consumo nos respondieron que con su recomendación sobre las mascarillas FFP2 lo que hace "es recordar lo que diferentes organismos internacionales vienen trasladando". Sobre las palabras de Fernando Simón, el ministerio de Garzón echó balones fuera, asegurando que necesitarían conocer el contexto de estas declaraciones para "poder analizarlas".
Tras la respuesta de Consumo a este medio de comunicación, en la que se desentendía de las declaraciones del director del Centro de Alertas y Emergencias, este viernes a Fernando Simón le han vuelto a poner sobre la mesa el asunto de las mascarillas. En concreto, le han preguntado "en caso de tener que llevar mascarilla, ¿cuál es la más adecuada? ¿deberíamos llevar mascarilla quirúrgica o del tipo FFP2?.
En su respuesta, Simón ha asegurado que "si lo que queremos es proteger a una persona altamente vulnerable, buscaremos mascarillas que prevengan la infección del que la lleva al máximo, esas son FFP2. Pero sí que es cierto que no están recomendadas para la población general". A esto, añadía que las mascarillas quirúrgicas "son más llevaderas y más asequibles y son, probablemente, la mascarilla más útil cuando hablamos de los contagios poblacionales".
Como acaban de leer, en una semana y tras el comunicado del Ministerio de Consumo, Fernando Simón ha cambiado su criterio. Si el 8 de mayo aseguró que "el uso las mascarillas FFP2 está indicado para personas sanas, las personas que tienen sintomatología deberían utilizar las quirúrgicas". Una semana después, ha afirmado que "si lo que queremos es proteger a una persona altamente vulnerable, buscaremos mascarillas que prevengan la infección del que la lleva al máximo esas son FFP2. Pero si que es cierto que no están recomendadas para la población general".
Y para muestra un botón, el pasado 8 de mayo La Vanguardía se hizo eco de las palabras de Simón y tituló : "Simón recuerda que las mascarillas FFP2 son para personas sanas y las quirúrgicas para infectadas". En cambio, este viernes 15 de mayo, el titular que recoge otro medio como Onda Cero es "Fernando Simón: Las mascarillas FFP2 no están recomendadas para la población en general pero sí sería importante que la lleve una persona vulnerable".