El Gobierno no pierde oportunidad, ni en los momentos de acercamiento. La voluntad manifestada este lunes por el líder del PP, Pablo Casado, de acudir a la llamada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para celebrar unos posibles Pactos de la Moncloa, ha sido celebrada de una forma sui generis por el Ejecutivo.
En rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, quiso celebrar la noticia incluyendo una pequeña pulla para el líder del PP: "Me gustaría citar una frase de Keynes que dice 'cuando parece que va a suceder lo inevitable, ocurre lo inesperado'".
Una cita que bien podría aplicarse para describir el supuesto cambio de actitud de un Gobierno que se afanó el pasado jueves en atizar a la oposición al tiempo que les tendían la mano a los pactos. Sin embargo, Marlaska obvió esta cuestión y se limitó a celebrar que "hoy hemos escuchado al presidente del PP que ha manifestado que acudirá a ese llamamiento del presidente. En ese sentido, es positivo que el jefe de la oposición reconozca que va a acudir al llamamiento del presidente, quiero entender que es por la necesidad de involucrarse en la reconstrucción" del país en el plano económico y social.
También recordó que "esta semana tendrán lugar los primeros encuentros entre el presidente del Gobierno y los representantes de fuerzas políticas y sociales" para celebrar una reunión a finales de semana "con el fin de encauzar algo tan importante y tan necesario como lo que solicitan más de las tres cuartas partes de la sociedad española: que después de vencer al virus tenemos que proceder a un acuerdo necesario de reconstrucción social y económica de nuestro país".
Marlaska destacó las diferencias entre la "España de 2020 y la de los Pactos de la Moncloa pero sí que podemos imbuirnos de ese espíritu", dado que la España actual "es una España multipartidista" y que "la única manera de reconstruir el país" es con la participación "y el compromiso de todos".