El éxodo desde las ciudades a pequeñas localidades con el objetivo de pasar en las mismas el periodo de confinamiento en los hogares provocado por la pandemia del coronavirus está siendo una fuente de importantes polémicas en las zonas rurales. Especialmente porque en estas áreas suelen vivir sobre todo personas mayores, un perfil que tiene el mayor porcentaje de defunciones por el virus de Wuhan.
Es por ello que la Guardia Civil ha pedido este viernes a los alcaldes de pequeños municipios que se pongan en contacto con los acuartelamientos del Instituto Armado más próximos a sus localidades para avisar si sospechan de la presencia de vecinos que se hayan trasladado a la zona durante este periodo de confinamiento. El objetivo es que los guardias civiles puedan comprobar si lo han hecho vulnerando la cuarentena o si lo hicieron con anterioridad.
La petición la ha realizado el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, el general José Manuel Santiago, durante su intervención en la rueda de prensa diaria que se celebra en el Palacio de la Moncloa y en la que participan los miembros del Comité de Gestión Técnica que lucha contra el coronavirus.
"No estamos recibiendo datos de que se haya incrementado ese éxodo o idas y venidas a las segundas residencias. Apelo a los alcaldes para que, si tienen conocimiento de posibles éxodos, acudan a la Guardia Civil para que analicemos la situación y si es necesario poner más controles en esa zona, lo haríamos, o si es necesario reforzar con otro tipo de actuaciones, también actuaríamos en consecuencia", ha dicho.
El alto mando del Instituto Armado ha detallado que en las últimas horas se han interceptado más de 3.000 vehículos que están violando las normas del confinamiento, una cifra similar a la de días anteriores, y que no tiene datos desglosados para saber cuántos de ellos eran gente que se estaba desplazando a segundas residencias. Un dato desglosado que tampoco tenía el responsable de la Subdirección Logística de la Policía Nacional, el comisario José García Molina.
AlertCops y la primera detención VIOGEN
Pero el dato que sí ha confirmado el portavoz de la Policía es el de la detención de la primera persona acusada de violencia de género fruto del uso del nuevo botón SOS que el Ministerio del Interior ha incorporado durante esta cuarentena a la aplicación gratuita para móviles AlertCops, que permite a los ciudadanos estar en contacto directo con las Fuerzas de Seguridad, facilitando incluso su geolocalización.
Según ha informado, los hechos ocurrieron en Tenerife, cuando la sala del 091 recibió una alerta por la pulsación del botón SOS que había hecho una mujer. El responsable policial contactó urgentemente con la víctima, que en un primer momento dijo que estaba probando la aplicación para comprobar si funcionaba. Pero el agente, ante las sospechas de que pudiera encontrarse en peligro, le indicó que se dirigiera a un lugar seguro y le contase lo que sucedía.
Fue entonces cuando relató los malos tratos de los que era víctima, situación que ya padecía antes de que se impusieran las medidas de restricción de movimientos del estado de alarma. El último episodio de violencia lo había sufrido unos días atrás cuando recibió varios golpes y empujones por parte de su pareja, quien además la amenaza de forma reiterada y no deja salir sola del domicilio.
Ante la gravedad de la situación un vehículo radiopatrulla se dirigió a su domicilio y se entrevistó con la mujer, que se encontraba en un gran estado de nerviosismo. Mientras les relataba la situación apareció su marido, que fue inmediatamente detenido y trasladado a dependencias policiales.