Ada Colau, la misma alcaldesa que expulsó al Ejército del Salón de la Enseñanza de Barcelona y que no ha dudado en mostrar toda clase de prejuicios y reticencias contra los militares, se ha desmarcado de la feroz oposición separatista a la presencia de las Fuerzas Armadas en Cataluña y les ha pedido ayuda para la construcción de un refugio para las personas sin hogar.
La alcaldesa no ha tenido inconveniente alguno en solicitar a la Unidad Militar de Emergencias (UME) -presente en Barcelona para desinfectar el Aeropuerto de El Prat y el Puerto- la construcción de un refugio provisional en la Feria de Barcelona que pueda acoger a las personas sin hogar que transitan por la capital catalana, según anunció este viernes en una rueda de prensa por videoconferencia.
El nuevo albergue, que se construirá en el pabellón 7 de la Feria, tendrá capacidad para unas mil personas, ocupará unos seis mil metros cuadrados y será gestionado por la Cruz Roja. Se calcula que en Barcelona hay unas mil cien personas que usan los albergues municipales para dormir y otras mil que lo hacen en la calle. Además del refugio que debe construir la UME, el Ayuntamiento ha llegado a un acuerdo con los propietarios de doscientos pisos turísticos para cederlos a personas sin hogar.