Instituciones Penitenciarias aclara que los presos golpistas del 1-O no podrán dormir en sus casas por la pandemia del coronavirus.
En una nota aclaratoria, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias afirma que envió ayer un escrito a los Centros de Inserción Social (CIS) y a las secciones abiertas de los centros penitenciarios para desarrollar la orden ministerial enviada el 15 de marzo con medidas para paliar el contagio del coronavirus entre los internos que custodian: terceros grados e internos que tienen aplicado el régimen de flexibilidad (artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario).
Después añade que "la modalidad de cumplimento de un tercer grado es competencia de las juntas de tratamiento de los establecimientos penitenciarios. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias no puede ordenar -ni ha ordenado- que se envíe a los clasificados en tercer grado a finalizar su condena en casa".
Según las fuentes consultadas por Libertad Digital, "todos los presos golpistas del 1-O se encuentran recluidos en el módulo 2 de la prisión de Lledoners y sólo el presidente de Ómnium Cultural, Jordi Cuixart, se encuentra en cuarentena, tras salir el lunes por la mañana de la cárcel y volver en el mismo día". "Cuixart están en una celda aislado del resto de presos y baja al patio por separado", añaden.
En este contexto, Instituciones Penitenciarias afirma que "el artículo 86.4 del Reglamento Penitenciario es una modalidad de cumplimiento del tercer grado desde casa con un control telemático. Es por tanto aplicable exclusivamente a los internos en tercer grado, previa deliberación individualizada -caso por caso- de la Junta de Tratamiento. Los internos clasificados en 100.2 no tienen posibilidad de pernoctar en sus domicilios ni de acceder al control telemático, salvo que lo haya autorizado previamente el juez en su plan de tratamiento individualizado".
"Con la crisis del coronavirus", añade el escrito, "muchos CIS y muchas secciones abiertas de la Administración General del Estado han optado por incrementar la concesión del artículo 86.4 con el fin de que -solo en aquellos casos en los que es posible, no en todos los casos- los internos en tercer grado puedan cumplir su condena con pulsera telemática desde casa. Ante ese incremento, la Secretaría General de Instituciones Penitenciaria envió ayer un escrito a esos establecimientos explicando que, mientras se adquieren nuevos dispositivos telemáticos, el control del cumplimiento en casa se puede realizar vía telefónica".
La Generalidad lo defiende "para evitar los contagios"
A la espera de que un juez pudiera autorizar esta posibilidad tras estudiar de manera individual el caso de los presos separatistas, desde la Generalidad defienden que los golpistas puedan regresar a casa durante el tiempo que se extienda la pandemia " para evitar los contagios" en las tres prisiones catalanas – Lledoners, Mas d'Enric y Puig de les Basses- donde cumplen condena por el referéndum ilegal de 2017 los nueve condenados por el Tribunal Supremo.
"Teniendo en cuenta que estamos hablando de una pandemia y de una transmisión del virus de una manera muy rápida podría ser que un preso, que ha salido fuera a hacer labores de reinserción, cuando vuelva la presión comparta este virus con el resto de presos", ha dicho el consejero de interior catalán, Miquel Buch en una entrevista en radio 4. De ahí que al dirigente separatista le parezca "una medida normal" para prevenir la transmisión de la epidemia. "Si afecta a los presos independentistas pues bien", ha concluido Buch.